Antonio Estupiñán Sánchez*
Conocer nuestro pasado legado aborigen en Gran Canaria es una asignatura que está pendiente por aclarar. Nuestros antepasados nos dejaron sus costumbres y enseres en las primitivas cuevas y cavernas, sus restos funerarios y sus grabados prehistóricos, plasmados en las lisas rocas, pero que nos resultan insuficientes de cara a quienes fueron realmente, a la verdadera y semi-escrita historia aborigen que nos dejaron en herencia, de cuyos escritos apenas tenemos reseña por los historiadores después de la conquista de esta isla, para, posteriormente, a través de los siglos, autores e historiadores hayan plasmados en sus libros las "supuestas y aproximadas creencias de nuestros antiguos habitantes, no sólo de esta isla, sino de las demás islas".
Mucho se ha escrito del reinado del Guanarteme de Gáldar y del Faicanato de Telde como núcleos principales de asentamientos aborígenes de Tamarán (Gran Canaria), pero…, ¿qué sabemos del tercer poblado en importancia que tenía su asentamiento en donde hoy está el municipio de Agüimes, incluyendo al municipio de Ingenio?
Éstos habitaron esta zona del Sureste de Gran Canaria desde el barrio de La Banda (Montaña de Agüimes, a escasos metros de la Iglesia del Buen Suceso, en Carrizal de Ingenio), hasta bien entrado el profundo y abrupto Barranco de Guayadeque, las zonas aledañas del casco histórico de Agüimes, la zona de Temisas y, esporádicamente, en la zona costera desde las playas de Gando, El Burrero, Vargas y Arinaga.
Se describe que la Fortaleza de Ansite (Santa Lucía de las Tirajanas) fue el último reducto de nuestros antepasados aborígenes, que prefirieron morir a estar sometidos a los conquistadores españoles-castellanos (siglo XIV-XV). Al estar Agüimes cercana a la famosa fortaleza-refugio y, también del entonces famoso puerto-abrigo de la Bahía de Gando, la población aborigen de Agüimes desapareció del mapa isleño misteriosamente. Seguimos reiterando una pregunta incontestable ¿Qué destino incierto tuvo el poblado aborigen de Agüimes, de cuyos restos, encontrados en cuevas y cavernas que habitaron y sirvieron también de necrópolis funerario, se ha enriquecido el Museo Canario de Las Palmas de Gran Canaria, aparte de poseer el más rico legado de los grabados alfabeiforme y cruciformes de origen bereber-tuarégs del periodo Neolítico (segunda edad de piedra) ubicado al Sur de la montaña sagrada del Roque Aguayro, conocida por Barranco de Balos? Una supuesta versión está en el aire… ¿Fue diezmado el poblado aborigen de Agüimes, como han estado haciendo con los restos prehistóricos de los Letreros de Balos?
El profesor, escritor y poeta Francisco Tarajano Pérez dejó plasmados en varios de sus libros, varias supuestas versiones del pasado legado aborigen de Agüimes y resumimos varias de ellas: "Alguna vez he dicho que la verdadera y la auténtica historia de Canarias, debe pasar, ineludiblemente, por la historia de cada municipio, y gran parte de esa historia está por escribir". En otro contexto, nos advierte que "por ignorancia e interés, la historia del Agüimes aborígen fue enmascarada y mutilada, los conquistadores implantaron la creencia de que el Agüimes-Guayrato, era un pueblo bárbaro, detestable y vergonzante, pero la memoria colectiva no se borró totalmente y tampoco las creaciones de nuestros antepasados aborígenes-canarios. En la actualidad se dice que somos, por cultura y educación, españoles y europeos”.
Mucho se ha escrito del reinado del Guanarteme de Gáldar y del Faicanato de Telde como núcleos principales de asentamientos aborígenes de Tamarán (Gran Canaria), pero…, ¿qué sabemos del tercer poblado en importancia que tenía su asentamiento en donde hoy está el municipio de Agüimes, incluyendo al municipio de Ingenio?
Éstos habitaron esta zona del Sureste de Gran Canaria desde el barrio de La Banda (Montaña de Agüimes, a escasos metros de la Iglesia del Buen Suceso, en Carrizal de Ingenio), hasta bien entrado el profundo y abrupto Barranco de Guayadeque, las zonas aledañas del casco histórico de Agüimes, la zona de Temisas y, esporádicamente, en la zona costera desde las playas de Gando, El Burrero, Vargas y Arinaga.
Se describe que la Fortaleza de Ansite (Santa Lucía de las Tirajanas) fue el último reducto de nuestros antepasados aborígenes, que prefirieron morir a estar sometidos a los conquistadores españoles-castellanos (siglo XIV-XV). Al estar Agüimes cercana a la famosa fortaleza-refugio y, también del entonces famoso puerto-abrigo de la Bahía de Gando, la población aborigen de Agüimes desapareció del mapa isleño misteriosamente. Seguimos reiterando una pregunta incontestable ¿Qué destino incierto tuvo el poblado aborigen de Agüimes, de cuyos restos, encontrados en cuevas y cavernas que habitaron y sirvieron también de necrópolis funerario, se ha enriquecido el Museo Canario de Las Palmas de Gran Canaria, aparte de poseer el más rico legado de los grabados alfabeiforme y cruciformes de origen bereber-tuarégs del periodo Neolítico (segunda edad de piedra) ubicado al Sur de la montaña sagrada del Roque Aguayro, conocida por Barranco de Balos? Una supuesta versión está en el aire… ¿Fue diezmado el poblado aborigen de Agüimes, como han estado haciendo con los restos prehistóricos de los Letreros de Balos?
El profesor, escritor y poeta Francisco Tarajano Pérez dejó plasmados en varios de sus libros, varias supuestas versiones del pasado legado aborigen de Agüimes y resumimos varias de ellas: "Alguna vez he dicho que la verdadera y la auténtica historia de Canarias, debe pasar, ineludiblemente, por la historia de cada municipio, y gran parte de esa historia está por escribir". En otro contexto, nos advierte que "por ignorancia e interés, la historia del Agüimes aborígen fue enmascarada y mutilada, los conquistadores implantaron la creencia de que el Agüimes-Guayrato, era un pueblo bárbaro, detestable y vergonzante, pero la memoria colectiva no se borró totalmente y tampoco las creaciones de nuestros antepasados aborígenes-canarios. En la actualidad se dice que somos, por cultura y educación, españoles y europeos”.
Francisco Tarajano, apostilló un improvisado verso:
"Un pueblo inculto no es libre,
besa manos de tirano,
teme a logreros caciques,
se arrodilla ante los amos"
*Antonio Estupiñán Sánchez es ex-decano de los corresponsales de la prensa escrita en Gran Canaria.