
El almeriense Víctor Fernández y el canario-alemán, residente en Playa de Vargas, Philip Köster (en la imagen), los dos mejores riders del momento del tour mundial, no defraudaron en la final del Campeonato del Mundo de Windsurf, celebrada ayer en Pozo Izquierdo.
Los dos windsurfistas mostraron maniobras de altísimo nivel y saltos de mucha potencia, y aunque la final se decantó por un escaso margen, a favor del primero, lo cierto es que cualquiera se pudo proclamar justo vencedor de esta 21ª edición del Gran Canaria Grand Prix.
Víctor y Philip pusieron la guinda a un campeonato inigualable en el mundo dentro de la modalidad de olas. La igualdad se mantuvo hasta el final, e incluso tuvieron que celebrar una manga de desempate, en la que se impuso por escaso margen el almeriense.
Entregados a tope en el agua, durante los doce minutos de la final mostraron la mejor versión de su windsurf, consiguiendo la admiración del público que no dejaba de aplaudir cada maniobra en las gradas de Pozo Izquierdo. La competitividad fue tal, que incluso el joven de Vargas perdió las quillas de su tabla al arriesgar demasiado en una maniobra muy cerca de la orilla en el final de la primera manga disputada entre ambos. Esta victoria en Pozo Izquierdo sitúa a Víctor Fernández al frente del ranking mundial de Olas 2010.
Víctor se mostró exultante al conocer el resultado y aseguraba que no se lo esperaba: "Siento una gran satisfacción. Es muy difícil ganar cuando en una eliminatoria doble pierdes en la primera manga y tienes que volver a competir". Y más, añadió, ante un rival como Philip, que para Víctor será el futuro campeón del mundo. "No sé cuando, pero lo conseguirá. Tiene un gran talento, es súper radical en sus maniobras y tan sólo tiene 16 años", afirmó el almeriense.