Sábado, 16 de abril.La Provincia
El Consorcio de Emergencias de Gran Canaria liquidará los presupuestos de 2010 con un saldo positivo de 389.000 euros y unos remanentes de tesorería de casi 3 millones de euros, por lo que no será necesario que los ayuntamientos aumenten su aportación económica en los próximos años.
Frente a la rebelión de los alcaldes contra el cobro de tasas a los ciudadanos y los informes que auguraban una quiebra económica a partir del año 2013, la Gerente del Consorcio, Paula Bernedo, adelantó el jueves que, por primera vez, en los años de existencia de la entidad, habrá un balance positivo entre ingresos y gastos, lo que garantiza el mantenimiento de los servicios.
Respecto a las quejas de los alcaldes por el cobro de tasas a ciudadanos que reclaman el servicio de los bomberos, Bernedo explicó que esa ordenanza se aprobó en 2004, bajo la presidencia de Domingo Bueno, con la unanimidad de los entes consorciados. Lo mismo ocurrió con las modificaciones puntuales de 2007 y 2008, que tuvieron el visto bueno de los representantes municipales, del Gobierno de Canarias y del Cabildo de Gran Canaria.
Por su parte, la Junta de Personal del Consorcio de Emergencias de Gran Canaria responsabilizó también a los propios ayuntamientos de que se esté cobrando a los ciudadanos por los servicios de los bomberos, pues "ningún alcalde ha solicitado hasta ahora la revisión de las tasas". El portavoz de los trabajadores, José María Monzón (en la imagen), señaló que las tasas que actualmente está cobrando el Consorcio fueron aprobadas de manera unánime en 2007, cuando el PP gobernaba en el Cabildo de Gran Canaria.
Monzón resaltó que "es una incongruencia que se estén llevando ahora las manos a la cabeza, pues son conscientes de que se están pasando facturas, y así lo reflejan los presupuestos que se aprueban cada año". A su juicio, los 19 ayuntamientos consorciados, junto al Cabildo de Gran Canaria y al Gobierno de Canarias, "son los únicos que tienen la potestad organizativa de crear y aprobar unas tasas, pues el Consorcio es sólo el brazo ejecutor de sus decisiones".
Frente a la rebelión de los alcaldes contra el cobro de tasas a los ciudadanos y los informes que auguraban una quiebra económica a partir del año 2013, la Gerente del Consorcio, Paula Bernedo, adelantó el jueves que, por primera vez, en los años de existencia de la entidad, habrá un balance positivo entre ingresos y gastos, lo que garantiza el mantenimiento de los servicios.
Respecto a las quejas de los alcaldes por el cobro de tasas a ciudadanos que reclaman el servicio de los bomberos, Bernedo explicó que esa ordenanza se aprobó en 2004, bajo la presidencia de Domingo Bueno, con la unanimidad de los entes consorciados. Lo mismo ocurrió con las modificaciones puntuales de 2007 y 2008, que tuvieron el visto bueno de los representantes municipales, del Gobierno de Canarias y del Cabildo de Gran Canaria.
Por su parte, la Junta de Personal del Consorcio de Emergencias de Gran Canaria responsabilizó también a los propios ayuntamientos de que se esté cobrando a los ciudadanos por los servicios de los bomberos, pues "ningún alcalde ha solicitado hasta ahora la revisión de las tasas". El portavoz de los trabajadores, José María Monzón (en la imagen), señaló que las tasas que actualmente está cobrando el Consorcio fueron aprobadas de manera unánime en 2007, cuando el PP gobernaba en el Cabildo de Gran Canaria.
Monzón resaltó que "es una incongruencia que se estén llevando ahora las manos a la cabeza, pues son conscientes de que se están pasando facturas, y así lo reflejan los presupuestos que se aprueban cada año". A su juicio, los 19 ayuntamientos consorciados, junto al Cabildo de Gran Canaria y al Gobierno de Canarias, "son los únicos que tienen la potestad organizativa de crear y aprobar unas tasas, pues el Consorcio es sólo el brazo ejecutor de sus decisiones".