El Digital de Canarias
La formación Alternativa Sí Se Puede por Tenerife, ante el debate abierto sobre el papel de las distintas instituciones insulares con la actual crisis económica, considera que existen modelos de mancomunidades que llevan bastantes años funcionando y que pueden servir de ejemplo para el desarrollo municipal de Tenerife. Para Sí Se Puede, su desarrollo mejoraría la gestión local, conservando al mismo tiempo instituciones cercanas a los vecinos.
Para el portavoz de Alternativa Sí Se Puede por Tenerife, Fernando Sabaté (en la imagen), "es necesario tener una clara voluntad política para hacer efectiva esta propuesta. Uno de los ejemplos más claros del éxito de este tipo de organizaciones intermunicipales en Canarias es el dela Mancomunidad del Sureste de Gran Canaria, que engloba a los municipios de Ingenio, Santa Lucía y Agüimes".
En este sentido, apunta que "en los últimos años hemos mantenido una fluida relación de trabajo y de puesta en común de experiencias con representantes de esta mancomunidad. Su trabajo demuestra que es posible optimizar los recursos públicos, generar empleos de calidad en nuevos sectores, poner en prácticas acciones reales basadas en el desarrollo sostenible y realizar políticas que beneficien al conjunto de los vecinos de cada municipio".
Desde Sí Se Puede consideran que, en el actual contexto económico, se hace más urgente que nunca realizar una apuesta en favor de un cambio de modelo. En este proceso es donde creen que las mancomunidades pueden jugar un importante papel, respaldando al sector primario, apoyando el desarrollo de energías limpias, mejorando la labor de los servicios sociales municipales o estableciendo usos más racionales del territorio.
Sabaté cree que el ejemplo dela Mancomunidad del Sureste de Gran Canaria, más allá de una simple mejora de las arcas municipales, "marca una nueva forma de gestionar los recursos, generando una nueva cultura del territorio, que nos permite establecer la pauta a seguir para diversificar la economía. Esta diversificación permitirá al mismo tiempo potenciar nuestros recursos naturales, conservar nuestro medio y generar nuevas formas de hacer políticas beneficiosas para la colectividad".
Por último, el portavoz de Sí Se Puede se muestra convencido de que "en todo caso, en el debate sobre la modificación de la organización territorial abierto en Canarias y en el Estado, los protagonistas principales deben ser los ciudadanos, cualquier propuesta o medida que se quiera aplicar debe hacerse mediante la implicación activa y consciente del conjunto de la sociedad, no a sus espaldas como en ocasiones anteriores".
Para el portavoz de Alternativa Sí Se Puede por Tenerife, Fernando Sabaté (en la imagen), "es necesario tener una clara voluntad política para hacer efectiva esta propuesta. Uno de los ejemplos más claros del éxito de este tipo de organizaciones intermunicipales en Canarias es el de
En este sentido, apunta que "en los últimos años hemos mantenido una fluida relación de trabajo y de puesta en común de experiencias con representantes de esta mancomunidad. Su trabajo demuestra que es posible optimizar los recursos públicos, generar empleos de calidad en nuevos sectores, poner en prácticas acciones reales basadas en el desarrollo sostenible y realizar políticas que beneficien al conjunto de los vecinos de cada municipio".
Desde Sí Se Puede consideran que, en el actual contexto económico, se hace más urgente que nunca realizar una apuesta en favor de un cambio de modelo. En este proceso es donde creen que las mancomunidades pueden jugar un importante papel, respaldando al sector primario, apoyando el desarrollo de energías limpias, mejorando la labor de los servicios sociales municipales o estableciendo usos más racionales del territorio.
Sabaté cree que el ejemplo de
Por último, el portavoz de Sí Se Puede se muestra convencido de que "en todo caso, en el debate sobre la modificación de la organización territorial abierto en Canarias y en el Estado, los protagonistas principales deben ser los ciudadanos, cualquier propuesta o medida que se quiera aplicar debe hacerse mediante la implicación activa y consciente del conjunto de la sociedad, no a sus espaldas como en ocasiones anteriores".