![]() |
El Presidente de Enagas, Antonio Llardén, en una imagen de archivo |
La obligación de hacerse con el 100% de las dos plantas regasificadoras previstas en Canarias (Arinaga y Granadilla) supondrá para Enagas una inversión adicional de entre 300 y 350 millones de euros a partir de 2015.
Según recordó ayer el Presidente de Enagas, Antonio Llardén, la obligación de hacerse con estas plantas, recogida en el proyecto de Ley de Sistemas Eléctricos Extrapeninsulares, supondrá pasar de tener un 40% de participación al 100%.
El traspaso afectaría a los proyectos de Arinaga y Granadilla, ambas de titularidad de Gascan, sociedad integrada por Endesa (con un 41,94% del capital), Enagas (41,18%) y la Sociedad para el Desarrollo Económico de Canarias (10,88%).
Llardén ha detallado que construir estas dos regasificadoras supone unos 600 millones de euros de inversión, por lo que su esfuerzo adicional rondaría esos 300-350 millones.
"Siempre después de 2015", ha enfatizado el Presidente de Enagas, Antonio Llardén, que ha subrayado la necesidad de medidas para contener los sobrecostes de los sistemas extrapeninsulares e introducir el gas en Canarias.
Enagas presentó ayer los resultados del primer trimestre, periodo en el que ganó 95 millones de euros, un 9,6% más, por la incorporación de nuevos activos y mejoras en la eficiencia.