Sábado, 16 de agosto.
Antonio Cerpa*
Cuando escucho a muchos
comentaristas (tertulianos) de radio y televisión hablando del tema de las
prospecciones petrolíferas en Canarias; cuando escucho las equiparaciones, sin
matices, que hacen de las situaciones de Tarragona y de Canarias; cuando
descubro que pasan por alto la dependencia absoluta de nuestra tierra con la
desalinización del agua del mar para "poder beber"; cuando pretenden
ignorar las extraordinarias condiciones de Canarias para desarrollar las energías
limpias (es difícil encontrar en el mundo una región con sol y viento 360 días
al año y un mar tan potente); cuando olvidan que la isla de El Hierro es el único
lugar en el planeta que se abastece exclusivamente de energías alternativas; cuando les escucho pregonar con suficiencia y algo de desdén que las aguas que
rodean nuestras islas son de "España y no de Canarias", sin
importarles tres carajos lo que nosotros podamos pensar, ni lo que nos pueda
pasar; cuando escucho todo esto, y otras muchas cosas que ya me da rabia
repetir, me resulta de lo más congruente decir que Canarias está recibiendo un
trato colonial y vejatorio.
Me parece más grave está
insensibilidad que muestran muchos periodistas que la actitud despótica y
autoritaria del gobierno. Viene a demostrar que el mal está mucho más enraizado
de lo que pudiera parecer.
*Antonio Cerpa es natural de Telde, estudió Sociología, fue sacerdote en Temisas y, actualmente, reside en Madrid.