La Provincia
Un futbolista del CD Juan Grande propinó, supuestamente, una patada a un jugador del CD Arinaga durante el descanso del encuentro de fútbol de Segunda Regional que se disputó la noche del pasado viernes en el terreno de juego del primero, en el término municipal de San Bartolomé de Tirajana. El agredido sufrió una fractura del tabique nasal, desviación de la nariz y otros traumatismos en la cara por lo que, probablemente, tendrá que ser operado.
Los hechos, según la parte denunciante, ocurrieron al final de la primera parte del partido, cuando los jugadores y el trío arbitral se dirigían a los vestuarios. Raúl S. R., de 20 años, estaba agachado, cerca de los vestuarios, prestando su atención a una de las botas y a la tobillera, cuando Valerio L. M. fue hacia él y le propinó una "fuerte patada".
El Presidente del CD Arinaga, José María Blanco, manifestó que durante los primeros 45 minutos de este choque de la segunda jornada de la temporada 2014-15 hubo roces entre ambos y pisotones por parte Valerio L. M. que "parece que el árbitro no vio".
Después de la agresión, los jugadores llamaron al árbitro, que ya se encontraba en el vestuario, al tiempo que el equipo de la Playa de Arinaga pidió la presencia de la Policía Nacional y de la ambulancia a través de su aseguradora.
El jugador agredido fue trasladado a la Clínica Santa Catalina, donde fue atendido de las heridas. Representantes del CD Arinaga denunciaron lo sucedido, al tiempo que presentaban el parte de lesiones, en los juzgados de San Bartolomé de Tirajana, donde ya declararon los futbolistas que fueron testigos de la agresión. En estos mismo juzgados está previsto que hoy martes se celebre el juicio rápido por la presunta agresión.
Por su parte, el presidente del CD Juan Grande, Agustín Sánchez, mantuvo una versión distinta sobre lo sucedido. "Se montó, apunta, una pelotera entre todos los jugadores, que estaban apiñados hacia la salida en dirección a los vestuarios. Y algunos empujones y golpes se dieron entre ellos. Ninguno de mis futbolistas admite que dio al agredido. Que lo decida el juez. Yo no lo vi directamente porque estaba en la grada". Sánchez admitió: "Ninguno de los integrantes de mi equipo tuvo que ser atendido por sanitarios, ni ser llevado a la clínica. Sólo Valerio tenía un golpe en el pecho, pero no quiso ser atendido, no lo consideró necesario".
El máximo responsable del CD Arinaga lamentó que se haya producido este tipo de acto violento en un terreno. "No suele pasar. Lo que nosotros tenemos claro es que si ocurriera por nuestra parte, que un jugador pegase a alguien, no volvería a un terreno de juego en mucho tiempo", afirmó José María Blanco, que agregó que "hemos echado de menos una llamada telefónica o algo de interés por parte del CD Juan Grande de cómo está de salud el futbolista que sufrió la patada".
Finalmente, las dos partes remiten y esperan la sentencia del titular juzgado de San Bartolomé de Tirajana. Respecto a la justicia deportiva, habrá que esperar que el Comité de Competición de la Federación Interinsular de Fútbol de Las Palmas se reúna mañana miércoles para que examine el acta arbitral y conozca los testimonios de todas partes.