Cartel de la exposición de Paco Suárez en Garachico |
La reciente escultura de Paco Suárez nos obliga, una vez más, a contemplar el insoslayable arcaísmo de las huellas humanas en Gran Canaria ya conjugarlas en otra nueva etapa de la modernidad artística.
Su escultura surge a partir de una dinamización espacial del signo plano, una libre adaptación e interpretación de figuras antropomórficas y motivos simbólicos cuyo último sentido jamás podremos descifrar.
Es esa plasticidad que emanan los grabados de Balos la que le inspira a crear toda una serie de esculturas en tres y dos dimensiones, tallas en madera de carácter expresionista, relieves recortados en madera y paisajes a partir de los huecos creados. Una escultura que abarca el impulso sagrado del imaginario primitivista y que acaba en la descripción de la geografía real de la isla.
Paco Suárez ha trabajado principalmente en la escultura pública en la mayoría de los municipios de Gran Canaria. Así, es autor de esculturas como la del homenaje en el Estadio de Gran Canaria a la cantera del fútbol grancanario, representada en la figura de David Silva; "Moros del Tabor", en el Parque de los Moros de Agüimes; "Quesera", en la Plaza de Casas Pastores, en Santa Lucía; "Señor Elías", en la Plaza de Mogán; "Pescador", en el Muelle de Arinaga; "Camino de la madera", en la fachada de la Iglesia de La Orilla de Sardina; "Empaquetadoras de tomates", en la rotonda de la circunvalación de Carrizal a Ingenio; "Señorita Josefa", en Carrizal; "Homenaje al voluntariado", en la Avenida de Canarias, en Vecindario; "Doña Nieves Santana, la partera", en Mogán; "Venus de vida", en la fachada del Consultorio Médico de Arinaga; o "El futuro es mujer", en el Mirador de Las Crucitas de Agüimes, entre otras.
Además, desde junio de 2011, la ciudad noruega de Bergen cuenta también con otra de sus esculturas, que representa a un nicho marchando con un fusil al hombro, que fue inaugurada con motivo del Día de Noruega, y que homenajea a los antiguos componentes que formaron parte de las bandas de cornetas y tambores, a mitad del pasado siglo XX.
Paco Suárez ha trabajado principalmente en la escultura pública en la mayoría de los municipios de Gran Canaria. Así, es autor de esculturas como la del homenaje en el Estadio de Gran Canaria a la cantera del fútbol grancanario, representada en la figura de David Silva; "Moros del Tabor", en el Parque de los Moros de Agüimes; "Quesera", en la Plaza de Casas Pastores, en Santa Lucía; "Señor Elías", en la Plaza de Mogán; "Pescador", en el Muelle de Arinaga; "Camino de la madera", en la fachada de la Iglesia de La Orilla de Sardina; "Empaquetadoras de tomates", en la rotonda de la circunvalación de Carrizal a Ingenio; "Señorita Josefa", en Carrizal; "Homenaje al voluntariado", en la Avenida de Canarias, en Vecindario; "Doña Nieves Santana, la partera", en Mogán; "Venus de vida", en la fachada del Consultorio Médico de Arinaga; o "El futuro es mujer", en el Mirador de Las Crucitas de Agüimes, entre otras.
Además, desde junio de 2011, la ciudad noruega de Bergen cuenta también con otra de sus esculturas, que representa a un nicho marchando con un fusil al hombro, que fue inaugurada con motivo del Día de Noruega, y que homenajea a los antiguos componentes que formaron parte de las bandas de cornetas y tambores, a mitad del pasado siglo XX.