 |
| Los equipos de emergencia durante la extinción del fuego |
Ayer, a las 11.45 horas, se alertó al Centro Coordinador de Emergencias y Seguridad (Cecoes) 1-1-2 de un conato de incendio originado en un pozo en el Barranco de Las Vacas, en Los Corralillos, que afectaba a una zona de matorral, con el consiguiente peligro de propagación de las llamas, y a las instalaciones de un grupo electrógeno, por lo que se activaron los recursos de emergencias necesarios, trasladándose al lugar una dotación de los Bomberos del Consorcio de Emergencias de Gran Canaria, con base en el Polígono Industrial de Arinaga, compuesto por cuatro efectivos (tres bomberos y un cabo), así como una ambulancia del Servicio de Urgencias Canario (SUC) en preventivo, aunque no fue necesaria su actuación, y agentes de la Guardia Civil y Policía Local de Agüimes, que instruyeron las diligencias correspondientes.
Una vez en el punto indicado, los bomberos perimetraron la zona y extinguieron las llamas que afectaban a la vegetación para acceder al interior de la edificación, aunque se vieron obligados a solicitar la colaboración del parque de Telde y de los agentes de medio ambiente, pues en las inmediaciones se encontraba también un depósito con combustible, así como por las altas temperaturas que se han registrado durante todo el día.
Al llegar los refuerzos de Medio Ambiente, y con la presencia de un helicóptero del Cabildo de Gran Canaria dotado con bambi, que realizó algunas descargas de agua, se procedió a sofocar el fuego que afectó a unos mil metros cuadrados del edificio en cuestión y a otros quinientos metros cuadrados de la zona de matorral, compuesto de pastizal, tabaibas y pitas.
Posteriormente, se personaron también los Bomberos del Parque de La Garita, en Telde, con una cisterna de agua para dar relevo a sus compañeros y continuar con los trabajos de extinción y refresco de la zona afectada.
