19 de septiembre de 2018

La Almazara Municipal Señorío de Agüimes abre sus puertas a la llegada de la aceituna

Miércoles, 19 de septiembre.

Racimos de uvas antes de su recolección
Redacción
La Almazara Municipal Señorío de Agüimes comenzará el próximo lunes la campaña de recogida de aceituna de los agricultores residentes en el municipio o de aquellos, que no siendo residentes, tengan sus olivos plantados en el término municipal para la producción del aceite de oliva virgen extra Caserío de Temisas, que se podrá retirar a principios del próximo año.
La recepción de las aceitunas se realizará semanalmente, los lunes y martes, en horario de 08.00 a 10.30 horas, si bien aquellas personas que deseen llevar su producción a la almazara deberán ponerse previamente en contacto con el área de Desarrollo Rural del Ayuntamiento de Agüimes, ya sea personándose directamente en las oficinas de la concejalía o llamando al teléfono 928.789.980 (extensiones 221 o 222).
Las aceitunas deberán estar sanas y libres de impurezas (hojas, ramas, piedras, etc.), en su punto óptimo de maduración y recolectadas el día anterior a su entrada en la almazara, y es condición indispensable aportar el cuaderno de campo debidamente actualizado con los últimos tratamientos fitosanitarios realizados.
Por otra parte, ya ha comenzado la vendimia de la uva moscatel de Alejandría más tardía de la historia de la Bodega Municipal de Agüimes, ya que las temperaturas frescas, la principal causa de que el nivel óptimo de maduración haya tardado en llegar, han retrasado en tres semanas la recolección de la uva respecto a la fecha habitual, que se sitúa a mediados o finales del mes de agosto.
En Agüimes, el método de recolección elegido por los viticultores es el manual, lo que les permite realizar una selección de los racimos y de las uvas, que permanecen enteras y sin perder mosto.
Durante la segunda fase de la cosecha, además, se respetan algunas reglas de base, tales como evitar la recogida de la uva mojada, pues el agua puede influir en la calidad del mosto, y evitar recolectar la fruta durante las horas más calientes del día para impedir fermentaciones indeseadas.
Tras la recolección, los racimos se colocan en pequeñas cajas para evitar aplastamientos y son llevadas rápidamente a la Bodega Municipal de Agüimes, donde se efectúa la vinificación que salven al fruto de maceraciones o fermentaciones indeseadas.
Esta fase se presenta como delicada, porque es fundamental que transcurra el menor tiempo posible ente la recolección y la pisa para evitar el deterioro de los granos de uva, siendo los racimos duros con la cáscara íntegra la principal premisa para obtener un buen vino.