Viernes, 10 de diciembre.
La representación legal del empresario agüimense Eustasio López, con el abogado penalista José María Palomino al frente, ha recurrido ante el Juzgado de Instrucción número 2 de Las Palmas de Gran Canaria, y subsidiariamente en apelación ante la Audiencia Provincial, el auto con fecha de 30 de noviembre que acordó su procesamiento y otras cinco personas (A.A.B., E.H.L., A.D., D.H.T. y E.C.C.) por el conocido como caso 18 Lovas.
En el escrito se señala que no hay argumentos para el procesamiento de Eustasio López, se subraya su colaboración en todo momento en la investigación y se recuerda que las dos jóvenes con las que se le relaciona ofrecieron versiones que contradicen el relato que hace el juez en el auto, y se solicita que "se dicte resolución dejando sin efecto el procesamiento dada la carencia de sólidos indicios racionales de criminalidad contra el mismo, en los términos exigidos en el artículo 384 de la Ley de Enjuiciamiento Criminal".
Sobre lo ocurrido, en el escrito de la defensa se incide en que las jóvenes presentes en la fiesta presentaban "todas ellas apariencia de personas adultas, como es perfectamente constatable en los selfies incorporados a la causa. No se trata de menores de 8 o 10 años, ni tampoco de 'adolescentes'. Todas ellas eras mayores de edad, salvo las supuestas víctimas I y XVII, a quienes les restaban pocos meses para serlo".
El escrito agrega que "esta circunstancia sobre la edad concreta era totalmente desconocida por el empresario. Nadie le advirtió de ello, ignoraba que ambas personas fueran aleccionadas por un tercero para sostener que eran mayores de edad y que ellas mismas querían hacerse pasar por personas adultas. Con base en un elemental principio de confianza, tanto en quien le había invitado, como en las propias asistentes, Eustasio López tenía la absoluta convicción de que estaba en presencia de personas mayores de edad. En ese convencimiento se desarrollaron los acontecimientos".
Asimismo, se asegura que "en ningún momento, en presencia del empresario, se habló de precio ni de prostitución, no se hizo pago alguno ni se convino o reconvino condiciones económicas", y agrega la representación legal que "nunca ha tenido contacto personal, telefónico o de cualquier otra naturaleza con el presunto cabecilla de la trama, el también agüimense Agustín A.B., que según ha sabido después, fue la persona que trasladó en su vehículo a las chicas hasta la finca en que se celebró la fiesta, sin llegar a acceder al recinto".
