Miércoles, 11 de mayo.
La Provincia
El Grupo Avícola Rujamar S.L.U. va a instalar en Agüimes un centro de producción de huevos frescos con una capacidad para 330.000 gallinas ponedoras y una producción idéntica de huevos al día destinados al consumo humano (entero) o a la industria de transformación (ovoproductos).
El proyecto, que ya cuenta con Informe de Autorización Ambiental, así como con el Estudio de Impacto Ambiental, documentos que acaba de sacar a información pública la Viceconsejería de Lucha contra el Cambio Climático del Gobierno de Canarias, conlleva la construcción de tres naves de puesta con espacio para 110.000 aves cada una, así como un centro de clasificación de los huevos, un espacio para las oficinas, un almacén de cartonaje y un depósito para el suministro de agua con capacidad para 360 metros cúbicos de agua.
Las instalaciones de Agüimes, en la zona de Hoya del Caldero, van a ocupar una superficie de unos 39.539 metros cuadrados, en una finca que se localiza a uno 1,3 kilómetros al sur del núcleo urbano, un emplazamiento que el grupo ha considerado idóneo a nivel de transporte y de logística por su buena conexión con la GC-1.
En el Estudio de Impacto Ambiental se señala que el suelo que ocupa está dentro de la Demarcación Hidrográfica de Gran Canaria, pero destaca que no aparece cerca de la zona de explotación de ningún cauce de agua reseñable, encontrándose el más cercano e importante a la zona de estudio, el Barranco de Guayadeque, a unos 1,9 kilómetros de distancia.
La granja avícola de Hoya del Caldero es la primera que implanta en Canarias el Grupo Rujamar, con sede en Cuenca, provincia donde ya cuenta con otros tres centros de producción en funcionamiento y con el proyecto para abrir otro más.
La empresa dispone de granjas en San Lorenzo de la Parrilla, Saelices y Honrubia, al que hay que sumar el previsto en San Clemente, orientado a la gallina de puesta tipo suelo y a las pollitas de recría.
Con las nuevas explotación de San Clemente y Agüimes, en las que se van a implantar las últimas tecnologías en materia de producción y cría de aves, haciendo a la explotación más competitiva para el mercado global en el que quiere competir, la empresa, participada en un 25% por el fondo Tresmares Capital (Banco Santander), se marca como reto duplicar las actuales cifras de producción avícola, según ha señalado el CEO de Grupo Rujamar, Rubén Martínez.
En Agüimes, la empresa va a implantar un sistema de alojamiento de las gallinas en varios niveles, en jaulas abiertas en varias filas que albergan comedores, bebederos, perchas y nidales de libre acceso y directo reservado a la puesta de huevos.
Los bloques de equipamiento de los aviarios están compuestos por una base a modo de rejillas que tienen por misión recoger bajo ellos, en un foso, los excrementos para poder mantener en mejor estado la yacija, además de facilitar que las gallinas satisfagan su tendencia natural a subirse a los altos, las aísla del suelo durante la noche y buena parte del día.
Tanto los animales como el pienso, medicamentos y demás material necesario serán suministrados por la propia empresa, que se encargará de todo el proceso productivo, desde el nacimiento de las pollitas hata la recría, selección y renovación de las aves.
Las naves disponen de un sistema de ventilación distintos para verano e invierno para eliminar los gases producidos como consecuencia de la respiración y putrefacción de las deyecciones (CO2, NH3, SH2), sobre lo que el Informe de Autorización Ambiental destaca que en este tipo de naves es necesario instalar ventiladores de al menos 50.000 metros cúbicos por hora para la extracción y renovación del aire.
El Grupo Avícola Rujamar es una industria agroalimentaria con sede en San Lorenzo de la Parrilla, en Cuenca, desde sus inicios en 1984 y que desarrolla su actividad en el sector avícola, en el que se dedica a la producción y comercialización de huevos, incluyendo las fases de clasificación, envasado y distribución para su consumo.
Desde 2002 y hasta la actualidad, la sociedad experimenta un proceso de ampliación y modernización de sus instalaciones, mejorando sus planta originales en San Lorenzo de la Parrilla, y creando nuevos centros en esa comarca, donde sigue creciendo, y desde donde ahora han decidido dar el salto al municipio de Agüimes.
