6 de agosto de 2022

El Gobierno de Canarias prevé el traslado de la cementera a Arinaga

 Sábado, 6 de agosto.

Sebastián Franquis durante su comparecencia ante los medios de comunicación
Redacción

El Consejero de Obras Públicas del Gobierno de Canarias, Sebastián Franquis, confirmó ayer que el ejecutivo regional prevé trasladar la cementera de Arguineguín al Polígono Industrial de Arinaga, si bien no se espera que ocurra antes de seis años.
Mientras tanto, la comisión de trabajo constituida por el Gobierno de Canarias para afrontar el futuro del Puerto de Santa Águeda ha recomendado que su nuevo uso sea mixto, turístico e industrial, a partir del próximo mes de octubre, cuando acabe la concesión a la empresa cementera.
Una vez transcurrido el plazo de adaptación a la nueva normativa, entre 6 y 8 años, el puerto solo será de uso turístico y deportivo, mientras que la fábrica deberá trasladarse a un nuevo espacio.
Franquis ha explicado que la comisión de trabajo considera que ese modelo combinado es coherente con la vocación de las instituciones de Gran Canaria de que los terrenos que rodean a ese puerto en Arguineguín se conviertan en un polo de desarrollo turístico sostenible.
En este sentido, ha precisado que la decisión final debe tomarla Puertos Canarios, pero también ha indicado que en este momento se estudia prorrogar temporalmente la concesión a favor de la cementera CEISa hasta que pueda trasladar su fábrica al Polígono Industrial de Arinaga, para lo que el Cabildo de Gran Canaria tendrá que transformar esa previsión en una determinación vinculante en el Plan Insular de Ordenación sujeto a revisión.
Solo así se podrá modificar posteriormente en tal sentido el planeamiento urbanístico de San Bartolomé de Tirajana, ha referido Franquis, que ha recalcado que se dan las condiciones para llegar a un "acuerdo de isla".
El consejero ha insistido en que se trata de buscar la mejor solución de isla, es decir, la que respete el interés público y no modifique la forma de vida de los vecinos-as de El Pajar, por lo que, antes de que finalice la actual concesión a la cementera, habrá que fijar un plazo de tiempo justo para que esta actividad industrial y la turística, a desarrollar en un puerto deportivo entre 150 y 200 atraques, nunca 2.000, puedan convivir un tiempo.
Ese horizonte temporal vendrá determinado por el tiempo que las administraciones grancanarias tarden en modificar sus respectivos planeamientos urbanísticos, que no será de menos de seis años, y también por la disponibilidad de suelo en el Puerto de Arinaga para instalar la cementera lo más cerca posible del muelle, algo que, según la Autoridad Portuaria de Las Palmas, no será viable hasta 2028.
Franquis ha asegurado finalmente que todas las partes afectadas por este cambio de uso de Santa Águeda coinciden, pese a que tienen intereses encontrados, en que sería bueno llegar a un buen acuerdo, en el que primará la protección del empleo y del tejido productivo de Gran Canaria.