Sábado, 24 de junio.
El Ministerio de Sanidad y las comunidades autónomas acordaron ayer acabar con la obligación de llevar mascarilla en los centros sanitarios, sociosanitarios y farmacias, los únicos lugares en los que persistía esta limitación.
La decisión se aprobará definitivamente en un próximo Consejo de Ministros, sin fecha decidida aún, aunque podría ser el próximo martes, en el que este elemento de protección pasaría ser recomendado, pero no obligatorio, siendo exigido únicamente en aquellas zonas en las que hayan pacientes inmunodeprimidos, como las unidades oncológicas o en los quirófanos y las UCI.
La decisión se ha tomado tras el análisis de un documento elaborado por los expertos del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias (CCAES), dirigido por Fernando Simón, sobre la situación de la pandemia en España.
Sobre la mesa habían varias opciones, abordando la retirada completa de la obligación de forma prolongada, definitiva o escalonada, aunque el Ministro de Sanidad, José Miñones, había asegurado la pasada semana que la decisión debía basarse en la opinión de los expertos.
Ayer, la voz discordante en esta medida fue la Comunidad de Madrid, y no por estar en contra del fin de la restricción, algo que desde la capital de España se había reclamado cuatro meses atrás, sino por el hecho de que se haya tomado casi un mes después de la elecciones autonómicas y municipales y justo un mes antes de las generales.
