Domingo, 26 de octubre.
Redacción
El Presidente del Cabildo de Gran Canaria, Antonio Morales, acompañó ayer a la Murga Los Sombreritos en la plantación de cincuenta olivos en la zona de El Milano, cada uno de ellos numerado y asignado a una pareja de murgueros, y con la que se pone fin a los actos conmemorativos del cincuenta aniversario de la formación.
Además, estuvieron presentes el Alcalde de Agüimes, Óscar Hernández, que es también miembro de la agrupación carnavalera, y el director del grupo, Alejandro González, así como la práctica totalidad de Los Sombreritos, compuesto en la actualidad por unos 106 componentes.
La intención del Ayuntamiento de Agüimes, que a partir de ahora colaborará con el riego de los árboles, es instalar mesas en la zona, una parcela anexa al Área Recreativa El Milano, donde las personas puedan comer, merendar y disfrutar de la sombra de estos ejemplares que perpetuará la memoria de la Murga Los Sombreritos.
La plantación, en la que se descubrió un monolito y una placa, se enmarca en la lista de iniciativas organizadas con motivo del medio siglo de historia del grupo, que ha incluido la publicación del libro firmado por Ramón Guimerá, "Los Sombreritos: una murga para quitarse el sombrero", o la exposición "50 años de disfraz, de canción, de vida. Murga Los Sombreritos" en la Sala de Arte Agüimes.
Antonio Morales indicó ayer que "Los Sombreritos nunca han sido remolones a la hora de incorporar a las nuevas generaciones y adaptarse a los tiempo, ya que son una clara muestra de la convivencia entre pasado y presente, adaptándose a nuevos gustos, ritmos y manera de diversión sin renunciar a su esencia".
Asimismo, aseguró que "el arraigo del Carnaval en Agüimes le ha convertido en parte inseparable de su identidad, así como en refuerzo y reflejo de su cohesión social y de su manera de ser", y preció que "Los Sombreritos cumple medio siglo como ejemplo de la capacidad del Carnval de Agüimes para mantener su vitalidad".
El presidente del gobierno de la isla finalizó destacando el talante de la murga, a la que define como una agrupación "integradora y amable, que no buscar generar tensiones innecesarias en la sociedad y que no descalifica, insulta o crea crispación", e ironizó diciendo que de todo esto "ya tenemos bastante".
Además, estuvieron presentes el Alcalde de Agüimes, Óscar Hernández, que es también miembro de la agrupación carnavalera, y el director del grupo, Alejandro González, así como la práctica totalidad de Los Sombreritos, compuesto en la actualidad por unos 106 componentes.
La intención del Ayuntamiento de Agüimes, que a partir de ahora colaborará con el riego de los árboles, es instalar mesas en la zona, una parcela anexa al Área Recreativa El Milano, donde las personas puedan comer, merendar y disfrutar de la sombra de estos ejemplares que perpetuará la memoria de la Murga Los Sombreritos.
La plantación, en la que se descubrió un monolito y una placa, se enmarca en la lista de iniciativas organizadas con motivo del medio siglo de historia del grupo, que ha incluido la publicación del libro firmado por Ramón Guimerá, "Los Sombreritos: una murga para quitarse el sombrero", o la exposición "50 años de disfraz, de canción, de vida. Murga Los Sombreritos" en la Sala de Arte Agüimes.
Antonio Morales indicó ayer que "Los Sombreritos nunca han sido remolones a la hora de incorporar a las nuevas generaciones y adaptarse a los tiempo, ya que son una clara muestra de la convivencia entre pasado y presente, adaptándose a nuevos gustos, ritmos y manera de diversión sin renunciar a su esencia".
Asimismo, aseguró que "el arraigo del Carnaval en Agüimes le ha convertido en parte inseparable de su identidad, así como en refuerzo y reflejo de su cohesión social y de su manera de ser", y preció que "Los Sombreritos cumple medio siglo como ejemplo de la capacidad del Carnval de Agüimes para mantener su vitalidad".
El presidente del gobierno de la isla finalizó destacando el talante de la murga, a la que define como una agrupación "integradora y amable, que no buscar generar tensiones innecesarias en la sociedad y que no descalifica, insulta o crea crispación", e ironizó diciendo que de todo esto "ya tenemos bastante".
