La Policía Nacional ha continuó ayer, por quinto día consecutivo, rastreando el chalet ubicado en la Playa de Vargas, propiedad del principal imputado en el caso kárate sobre presuntos delitos de abusos sexuales a menores y corrupción de menores, centrando sus esfuerzos en la inspección de un pozo negro por si escondiera alguna prueba.
Esta es la quinta jornada en la que efectivos de la Policía, entre otros, se trasladan hasta el domicilio de Torres Baena, mientras que los agentes, hasta el momento, no han podido encontrar ninguna pista clara que sirva para inculpar a los imputados, por lo que han centrado los trabajos en el pozo negro, según ha informa Televisión Canaria.
Fernando Torres Baena y su novia María José González Peña, también imputada y encarcelada por la causa, están acudiendo a los registros, tal como establece la ley, que lleva a cabo la Brigada Provincial de la Policía Judicial de Las Palmas en el domicilio del primero, en busca de posibles pistas.
Esta es la quinta jornada en la que efectivos de la Policía, entre otros, se trasladan hasta el domicilio de Torres Baena, mientras que los agentes, hasta el momento, no han podido encontrar ninguna pista clara que sirva para inculpar a los imputados, por lo que han centrado los trabajos en el pozo negro, según ha informa Televisión Canaria.
Fernando Torres Baena y su novia María José González Peña, también imputada y encarcelada por la causa, están acudiendo a los registros, tal como establece la ley, que lleva a cabo la Brigada Provincial de la Policía Judicial de Las Palmas en el domicilio del primero, en busca de posibles pistas.