Las oficinas de La Caja de Canarias en el municipio de Agüimes ya están repartiendo entre sus clientes los folletos elaborados por el Cabildo de Gran Canaria "Protégete contra incendios", con la intención de orientar a la población rural a un conjunto de hábitos que minimicen, en la medida de lo posible, el peligro de incendio, dada la época de verano en la que nos encontramos. Y junto a estas medidas de prevención, los folletos también facilitan las instrucciones y los pasos a seguir, en caso de que se desate un gran incendio forestal.La idea de realizar un folleto de Autoprotección contra incendios de viviendas en zona rural-forestal, nació de una colaboración de La Caja de Canarias con el Cabildo grancanario a raíz del extenso análisis que se desarrolla en la isla después del gran incendio de 2007.
Gran Canaria es una isla en la que se asienta un elevado número de población precisamente en ese espacio intermedio entre lo rural y lo estrictamente forestal. Se trata de un área muy extensa que incluye pueblos, barrios y términos municipales enteros, cuyo territorio siempre ha tenido una vocación agrícola y ganadera. Hoy en día estos usos conviven con otras actividades y es patente el abandono de determinadas parcelas y la recolonización descontrolada de vegetación, que en la práctica multiplica el riesgo de incendio.
La realización del folleto por parte del Cabildo de Gran Canaria ha ido encaminada a adaptar medidas contra incendios testadas a nivel internacional a la particular realidad canaria, y a las peculiaridades antes mencionadas de esa interfaz rural-forestal.
De hecho, las medidas contra incendios en buena parte de la Península están dirigidas a zonas exclusivamente de bosque, cuando en Canarias el espacio en riesgo está caracterizado por un matorral de sustitución que ocupa parcelas en desuso cerca de pequeños núcleos rurales.
En el folleto también hay un esfuerzo por presentar la información en un lenguaje accesible a todos los interesados, ya que la idea principal es ayudar a comprender la situación actual y procurar un modelo más seguro para las viviendas de este espacio.
La lectura del folleto lleva a entender la importancia y la manera de protegernos ante los incendios arrojando luz sobre los procedimientos, las limitaciones y el asesoramiento sobre lo que es la situación real y lo que sería la ideal. Además el folleto pretende un uso continuado, ya que no se limita a dar una información puntual, sino que sirve de modelo referente ante un territorio cambiante.
En principio, La Caja de Canarias está repartiendo por sus oficinas unos 20.000 folletos, al igual que los distintos ayuntamientos grancanarios, en colaboración con el Cabildo.
La realización del folleto por parte del Cabildo de Gran Canaria ha ido encaminada a adaptar medidas contra incendios testadas a nivel internacional a la particular realidad canaria, y a las peculiaridades antes mencionadas de esa interfaz rural-forestal.
De hecho, las medidas contra incendios en buena parte de la Península están dirigidas a zonas exclusivamente de bosque, cuando en Canarias el espacio en riesgo está caracterizado por un matorral de sustitución que ocupa parcelas en desuso cerca de pequeños núcleos rurales.
En el folleto también hay un esfuerzo por presentar la información en un lenguaje accesible a todos los interesados, ya que la idea principal es ayudar a comprender la situación actual y procurar un modelo más seguro para las viviendas de este espacio.
La lectura del folleto lleva a entender la importancia y la manera de protegernos ante los incendios arrojando luz sobre los procedimientos, las limitaciones y el asesoramiento sobre lo que es la situación real y lo que sería la ideal. Además el folleto pretende un uso continuado, ya que no se limita a dar una información puntual, sino que sirve de modelo referente ante un territorio cambiante.
En principio, La Caja de Canarias está repartiendo por sus oficinas unos 20.000 folletos, al igual que los distintos ayuntamientos grancanarios, en colaboración con el Cabildo.