17 de junio de 2016

Opinión: Ante presiones, firmeza. Ante el chantaje, rigor

Viernes, 17 de junio.

Óscar Hernández*
Hoy quiero compartir con ustedes una reflexión a tenor de los últimos acontecimientos en torno al proyecto del Mercado Agrícola Municipal del Cruce de Arinaga.
Como saben, este proyecto lo iniciamos desde el Ayuntamiento de Agüimes con cargo al Plan de Cooperación del Cabildo de Gran Canaria y salió a licitación pública mediante procedimiento abierto, con un importe previsto de 3.800.000 euros y un plazo de ejecución de 29 meses.
Después del proceso de adjudicación, la Junta de Gobierno Local acordó adjudicar la obra a una empresa que presentó una oferta por un total de 2.277.340 euros y con un plazo de ejecución de 15 meses. Era la oferta mejor valorada. No obstante, ante las dudas surgidas por las tan importantes reducciones en la oferta, se les pidió que justificaran esta rebaja en el precio (un 40,07% menos del precio previsto) y en el plazo (un 48,28% inferior), y lo hicieron. Justificaron su oferta. 
Sin embargo, durante el verano de 2014 (casi un año antes de las las elecciones de mayo de 2015) empezaron a poner problemas sobre el proyecto y nos informaron que para el buen desarrollo de la obra se requería de una aportación adicional por parte del ayuntamiento de entre 800.000 y 1.000.000 de euros. Alegaron adecuación del proyecto a las circunstancias del momento y la adaptación de materiales. Un despropósito.
Una tónica que algunos emplean para presionar a los gestores públicos y que estos antepongan al interés general, la voluntad de tener inaugurada una obra de tanta importancia antes de las elecciones locales.
Una costumbre a la que pretenden que se sucumba para ellos ganar dinero a costa del rédito electoral y de la buena gestión de los recursos.
Un inaceptable mercadeo con lo público.
Lo dijimos desde el primer momento y así lo hicimos. No cedemos a presiones o chantajes. No entendemos ningún interés distinto al interés general de los vecinos y vecinas de este municipio. No vamos a gestionar los recursos públicos con opacidad o sumisión. Si no se termina una obra en el tiempo previsto, se termina más adelante, antes o después de las elecciones, no nos preocupa. Nunca nos ha preocupado. Pero se hará conforme a la justicia y a la legalidad.
Así pues, la obra del Mercado Agrícola Municipal del Cruce de Arinaga se paralizó y comenzó un arduo expediente resolutorio del contrato por incumplimiento de la empresa.
Hace unos días recibíamos una comunicación del Consejo Consultivo de Canarias que nos daba la razón. Que afeaba con contundencia la actuación de la empresa y reconocía la labor del ayuntamiento en defensa del interés general.
Afortunadamente así avanzamos en la resolución de la relación contractual y eso nos permitirá que volvamos a adjudicar la obra para que se culmine cuanto antes y podamos disfrutar de una instalación esperada por todos.
Y es que después de situaciones como esta, la satisfacción del deber cumplido nos reafirma en que ante presiones, firmeza. Ante el chantaje, rigor.
*Óscar Hernández es Alcalde de Agüimes.