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| Nira, la niña de la eterna sonrisa |
Redacción
Nira Suárez Quesada, de 12 años, vecina del Cruce de Arinaga y conocida popularmente como Nira, la niña de la eterna sonrisa, falleció ayer en el Hospital Materno Infantil de Las Palmas de Gran Canaria.
La pequeña padecía desde su nacimiento la distrofia muscular Emery Dreifuss, una afección que actúa principalmente en los músculos que se emplean en la locomoción (músculo esquelético) y el músculo cardiaco.
Entre los rasgos de más temprana aparición se encuentran una deformidades de las articulaciones denominadas contracturas y que restringen los movimientos de algunas de ellas, afectando muy frecuentemente a los hombros, tobillos y cuello.
Nira "es una niña muy especial que aunque no tuviese fuerzas en el cuello y en las piernas se enfrentaba a la vida con alegría, siempre con una sonrisa en la cara". Así la recuerdan sus familiares, vecinos y amigos.
Su madre, Blasi Quesada, escribía ayer en una red social que "desde hoy tenemos una razón más para mirar al cielo y sonreír. Desde allí nos va a cuidad Nira, que nos acaba de dejar".
La niña se ganó el cariño de todos los canarios a raíz de su aparición en el programa "Héroes" de Televisión Canaria, en el que dio a conocer de cerca su lucha contra la enfermedad y le valió el apelativo de "la niña de la eterna sonrisa", un rasgo que le acompañará siempre.
La capilla ardiente de Nira, la niña de la eterna sonrisa, está instalada en el Tanatorio Municipal del Cruce de Arinaga, desde donde, a las 17.00 horas, se conducirá su cuerpo a la Iglesia de San José Obrero, donde se celebrará una misa de ángeles, y posteriormente al Crematorio del Sureste, donde se procederá a su incineración.
La capilla ardiente de Nira, la niña de la eterna sonrisa, está instalada en el Tanatorio Municipal del Cruce de Arinaga, desde donde, a las 17.00 horas, se conducirá su cuerpo a la Iglesia de San José Obrero, donde se celebrará una misa de ángeles, y posteriormente al Crematorio del Sureste, donde se procederá a su incineración.
