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| Vista del incendio desde el Polígono Industrial de Arinaga |
Redacción
Los Bomberos del Consorcio de Emergencias de Gran Canaria, con base en el Polígono Industrial de Arinaga, y a la hora de redactar esta noticia, se encontraban anoche en serios problemas para poder acceder a la zona del Barranco de Balos en la que se registró un nuevo incendio, el séptimo que se da en nuestro municipio en las últimas semanas.
Según la información a la que tuvimos acceso en el lugar, el fuego se localizaba en el linde entre los municipios de Agüimes y Santa Lucía, muy cerca del parque eólico que se ubica en el mismo centro del barranco, en una zona abierta, rodeada de fincas cerradas y sometida a fuertes rachas de viento, lo que provocaba que las llamas avanzaran poco a poco hacia el municipio vecino, sin que llegaran a afectar a las viviendas del barrio santaluceño de Los Llanos del Polvo.
Pasadas las 01.10 horas de la madrugada, los efectivos conseguían finalmente alcanzar el punto del incendio, que originó una intensa columna de humo, y comenzaron a trabajar en su extinción, una labor que, al igual que en las anteriores ocasiones, se prolongó durante buena parte de la noche.
Agentes de la Guardia Civil y de la Policía Local de Agüimes, que se personaron también en el lugar tras ser activados por el Centro Coordinador de Emergencias y Seguridad (Cecoes) 1-1-2, colaboraron con los bomberos a la hora de buscar una vía de acceso e instruyeron las diligencias correspondientes, que se unirán a las de los seis incendios anteriores para continuar con la investigación abierta que permita identificar al autor o autores de los mismos.
Las coincidencias entre los fuegos se centran en la hora en que se provoca, casi siempre pasadas las 22.00 o 22.30 horas; la zona elegida, en el ámbito del Cruce de Arinaga y Los Corralillos, a excepción de los de Montaña San Francisco y Las Rosas; y el terreno afectado, donde se acumula material vegetal y basura.
Esta oleada de incendios mantiene en vilo a los cuerpos de seguridad y emergencias, especialmente a los Bomberos del Consorcio de Emergencias de Gran Canaria, que ya han alertado del alto coste que estos fuegos continuos suponen y que resulta muy difícil de extinguir al tratarse de compost vegetal, por lo que las brasas continúan expulsando humo durante varios días.