La solidaridad agüimense llegará a la localidad gambiana de Lamin gracias a la donación que el ayuntamiento ha realizado esta misma semana la ONG Aseda Gambia (asedagambia.com), consistente en 200 unidades de productos para la higiene bucodental (cepillos y dentríficos) que han sido entregadas a los responsables de la organización, encargados de trasladarlos al dispensario que mantienen abierto en el Colegio Canarias de Lamin, con el objetivo de que sean distribuidos entre la población infantil de la localidad.
La ONG Aseda Gambia desarrolla en este municipio del oeste gambiano una serie de proyectos de cooperación centrados en proporcionar educación de calidad como pilar fundamental para el desarrollo de la comunidad y su actividad se lleva a cabo principalmente en el Colegio Canarias de Lamin, en el que, gracias a la aportación de empresas, instituciones y particulares de las islas, funciona un eficaz programa de becas con el que se apoya a las familias con menos recursos económicos.
Los padrinos canarios, por su parte, asumen el compromiso de costear la matrícula, el material y los gastos escolares de determinados niños-as que de otra manera se habrían visto abocados a abandonar sus estudios, por lo que es una apuesta por la educación como verdadero motor de transformación social en este país africano.
El Colegio Canarias de Lamin proporciona escolarización a más de 1.500 estudiantes, de los que 640 (más del 40%) son becados gracias a la ayuda internacional y, desde que la cooperación canaria forma parte de este proyecto, además de la becas se ha conseguido invertir en la mejora de las instalaciones con la renovación de aulas, mobiliario escolar, instalaciones eléctricas y aseos.
Asimismo, se ha puesto en marcha un dispensario de salud, al que irá destinado el material donado por el área de Cooperación al Desarrollo del Ayuntamiento de Agüimes, con el objetivo de que el alumnado tenga acceso gratuito a la sanidad.
Aseda Gambia se encuentra inmersa actualmente en el proyecto de construcción de un nuevo colegio con 120 plazas de educación infantil, que se espera que esté concluido en dos meses, y que se verá complementado en una segunda fase con un dispensario médico, cocina, comedor y aula de arte y juegos, y que será, por tanto, una oportunidad para que, a través de la educación gratuita, los niños-as puedan salir del círculo de la marginalidad y reviertan sus situación personal y la de sus familias.