Miércoles, 10 de noviembre.
La implantación de 17 aerogeneradores a 262 metros sobre el nivel del mar y a una distancia de entre 3 y 8 kilómetros de la costa sureste de Gran Canaria harán visible el Parque Eólico Marino San Borondón "desde diferentes puntos de la isla simultánea y secuencial", según el informe de la Dirección General de Salud Pública del Gobierno de Canarias sobre el proyecto promovido por Iberdrola.
En relación al estudio de impacto ambiental del parque eólico marino de más potencia que ha pedido instalarse en aguas españolas, Salud Pública considera "relevante y recomendable un análisis cuidadoso y exhaustivo" de los impactos sociales y sobre el turismo de la infraestructura de 238 MW prevista en aguas situadas entre Arinaga y Castillo del Romeral.
En su informe sobre la consulta del proyecto que tramita el Ministerio para la Transición Ecológica, Salud Pública cita el impacto visual sobre las playas de Pozo Izquierdo, El Inglés, Maspalomas y Meloneras, cuando la zona turística de la isla, con sus dunas y su charca, "es el referente más distintivo del turismo en Gran Canaria.
Asimismo, también advierte de "un efecto indeseado y no documentado" de los parques eólicos marinos, el flickering, que a su juicio podría producir un sombreado en las viviendas más cercanas al parque, por lo que reclama simulaciones que determinen si las sombras producidas por lo aerogeneradores alcanzarán las zonas residenciales y si incidirán en receptores potencialmente sensibles, así como valorar que, si se produce este efecto, cumpla con los límites de exposición a las proyecciones por año y por día.
Además, Salud Pública echa en falta en el proyecto un estudio anexo que analice exhaustivamente si las instalaciones marinas tendrían algún impacto en el oleaje y las mareas y, con ello, en la economía y el uso y disfrute de la zona, razón por la cual pide valorar el impacto del conjunto de turbinas planeadas sobre la dinámica de las olas, mareas y la superficie de lámina de agua disponible para la práctica deportiva acuática y la navegación, así como sobre la pesca y el potencial impacto en el turismo, los usuarios-as locales y los eventos y la economía asociados a este tipo de ocio.
Desde el Ayuntamiento de Santa Lucía de Tirajana se reclama también al Ministerio que tenga en cuenta el efecto acumulativo de todos los parques marinos proyectados en la misma zona y cómo afectará al paisaje y la calidad del viento, en especial al núcleo de Pozo Izquierdo, sus playas y la actividad del windsurf, dada la cantidad de aerogeneradores propuestos a menos de 4 kilómetros de la costa que serán visibles desde muchos puntos de la isla.
Para reducir ese efecto acumulativo, el consistorio santaluceño propone distribuir los aerogeneradores por distintos puntos de la costa, reducir su número o situarlos lo más alejado posible de la orilla.
Por su parte, la Autoridad Portuaria de Las Palmas ha emitido un informe desfavorable sobre la localización de San Borondón al coincidir la ubicación de varios aerogeneradores con el corredor de acceso y navegación al Puerto de Arinaga, lo que "supondrían un grave problema para la explotación del puerto de interés general", advierte al Ministerio.
Para continuar la tramitación, el documento de alcance del estudio de impacto elaborado por el Ministerio exige el cálculo de la cuenca visual de cada aerogenerador desde el punto más desfavorable , un plano de conjunto que refleje su visibilidad y que se analicen los efectos sinérgicos en el paisaje de la presencia de otros parques.
