Viernes, 7 de octubre.
La Sala de Arte Agüimes, en la segunda planta de la Casa de la Cultura de Agüimes casco, abre su puertas a la exposición "Viñetas grandes" de Javier Méndez, una muestra que se podrá visitar hasta el próximo día 28 de octubre, de lunes a viernes, en horario de 09.00 a 14.00 y de 16.00 a 20.00 horas.
"En los años 80 del pasado siglo, en los años de la Movida Madrileña, escribe el escultor y profesor de Artes Plásticas del IES Joaquín Artiles, Francisco Suárez, se produjo un movimiento creativo juvenil en el centro educativo de Agüimes que supuso un soplo de aire fresco en un municipio que se estaba desperezando, como todo el país, de la larga sombra de la dictadura.
La Transición daba la oportunidad a muchos artistas de diversas disciplinas de dar rienda suelta a su creatividad, lo que produjo un estallido de expresiones artísticas de todo tipo, desde la música popular al cine, la pintura, la fotografía, el cómic o la moda.
Al instituto llegaban profesores-as de otras zonas del país que ofrecían un visión diferente de la educación, con métodos nuevos e instrumentos motivadores para los chicos-as de Agüimes.
Es el momento de nacimiento del fanzine 'Anónimo' y el cómic 'Escape', una publicaciones que en sus inicios tuvieron un gran protagonismo los hermanos Méndez, Javier y Echo, que dotaban a estas creaciones de una gran calidad gracias a la destreza que tenían para el dibujo, siendo todavía unos muchachos".
El autor de esta exposición, Javier Méndez, "se ha mantenido fiel a su mundo creativo, poblado de seres espectrales que pululan por espacios de ensueño.
Los preceptos surrealistas de las vanguardias artísticas (Dalí, Magritte, Óscar Domínguez, Juan Ismael) siguen inspirando los dibujos de Javier Méndez, con asociaciones extrañas, espacios oníricos y personajes de ensueño que se despliegan en sus obra con la naturalidad propia que le permite su depurada técnica.
Los dibujos de Javier Méndez tienen la virtud de hacer real lo imaginario, porque trabaja con mucho realismo la irrealidad, concretando los sueños con una precisión casi fotográfica.
Tiene una mano virtuosa para trazar ese maremágnum de personajes con una delicadeza y profusión de detalles que sorprende a simple vista; sus dibujos a plumilla están hechos con mucho esmero, trazando con suma paciencia ese intrincado entramado de cuerpos que se funden en su cabeza y se despliegan sobre el papel línea a línea, minuciosamente, despacio, con tiempo.
Es una suerte, añade Paco Suárez, que Javier Méndez se haya animado y, finalmente, después de un largo periodo de producción favorecido por este desgraciado tiempo de pandemia, nos ofrezca una nueva colección de su rico imaginario creativo.
Los que conocemos su arte nos alegramos de esta nueva entrega y celebramos su disposición a seguir mostrando su destreza y su poderío creativo".
