30 de septiembre de 2023

Arinaga acoge una prueba científica con submarinos de una universidad alemana

 Sábado, 30 de septiembre.                                                                                                 

El alumnado de la universidad alemana con el sumergible en Arinaga (Foto: A.S.- C7)

Redacción

Arinaga recibe estos días a una delegación de la Universidad de Ciencias Aplicadas de Rhein-Waal (HSRW) de Alemania que prueba un sumergible tripulado a pedales, un proyecto diseñado por el alumnado de mecatrónica, área multidisciplinar que aúna electrónica, mecánica y robótica, y que participará en la Submarine Racing World Series, una competición mundial que se celebrará en Washington y Londres en la que rivalizan submarinos en miniatura de propulsión humana propuestos por universidades de todo el planeta.
La particularidad de esta cita radica en que por primera vez se va a desarrollar en agua salada, ya que hasta ahora se había trabajado únicamente en tanques de agua dulce en los que se mide cuál es el sumergible más rápido en recorrer una determinada distancia.
El minisubmarino que se prueba en Arinaga mide dos metros y estará tripulado por una persona, asistida con una bombona de oxígeno, que lo impulsará a pedales, pudiendo alcanzar los ocho metros de profundidad.
Sin embargo, estas pruebas se vieron el miércoles prohibidas por agentes de la Guardia Civil de Agüimes, que alegaron ante los responsables del proyecto que carecían del permiso de Capitanía Marítima.
Un día más tarde, técnicos de este organismo se personaron también en el Muelle de Arinaga y, tras la inspección oportuna, se concedió la licencia para continuar con la prueba científica, aspecto que se ha agradecido desde la delegación universitaria, que anuncia que hoy, a las 12.00 horas, se podrá seguir en pantalla de televisión los trabajos que están realizando con dos propulsores, uno de ello el River Shark, que data de 2007 y que ya ganó un campeonato mundial entre universidades, y el segundo, bautizado Chelonia, es una especie de tortuga que pesa solo 70 kilos.
La elección de Arinaga, que se decidió después de seis meses de búsqueda del lugar idóneo en varios puntos del mundo, se fundamenta en la visibilidad del agua, que es muy cristalina, que el mar se encuentra en calma en esta época del año y que está relativamente cerca de Alemania, lo que facilitó el traslado de la delegación universitaria.
Asimismo, destaca también el fondo marino de Arinaga, en el que predomina un tipo de arena gruesa que propicia que los segmentos se posen rápidamente tras el paso del submarino, algo fundamental para la visualización sin que el agua se vuelva turbia.
Los prototipos fueron trasladados desde Alemania hasta Huelva en camiones, donde los embarcaron al ferry para viajar hasta Gran Canaria.