7 de mayo de 2016

Elisa Volanti descubre el helado artesanal italiano a 16 profesionales de la pastelería y la hostelería

Sábado, 7 de mayo.
Foto de familia de los participantes en el curso (Foto: J.C. Castro)

La Provincia
Elisa Volanti, una italiana que desde los 16 años ha estado vinculada a la restauración, primero con la alta pastelería y después con la heladería, ha impartido esta semana en el Centro de Formación de Haricana, en el Polígono Industrial de Arinaga, un curso de helado artesanal de Italia en el que ha participado un grupo de 16 profesionales de la pastelería y la hostelería.
Volanti, que cuenta con numerosos cursos de formación, se especializó el año 2010 en un 2 Estrellas Michelín, el Restaurante Il San Domenico de la ciudad de Imola, en la alta pastelería internacional. Posteriormente se volcó en el mundo del gelato artigianale de la mano de Ice Team 1927 y, actulalmente, es la responsable de impartir clases, demostraciones y cursos tanto en la Scola Gealteneo de Ice Team 1927 de Bolonia, como en las master class itinerantes que organiza esta empresa por todo el mundo.
"El truco para hacer un buen helado es aplicar la fantasía a la técnica. A mí, lo que más me gusta es la mantecación y transformar el líquido en sólido", comenta la maestra heladera, que disfruta "ver al cliente saliendo satisfecho después de probar mis creaciones".
En el curso impartido en la sede de Haricana, Elisa Volanti, que ha contado con la colaboración de Thierry González, dirigente de Gelateneo, y José Antonio Santana (Climatización y Frío de Canarias-Clifrican), como organizados,  ha enseñado los parámetros claves para realizar diferentes helados artesanales con frutas del país. "La diferencia entre un helado artesanal y otro industrial está en la cantidad de aire que se usa, ya que mientras el artesano tiene como máximo un 45% de aire, el industrial se hace con hasta el 125%", comenta el traductor  Trierry González, que ha estado apoyando a Volanti en las clases. "Es menos graso y más dietético y facilita su uso como alimento, más que para refrescarse", añade.
González, que indica que "los escandinavos son los que más consumen helados, usándolo como alimento", asegura que "mientras los nórdicos consumen entre 40 y 45 kilos al año, los españoles lo hacen entre 20 y 25 kilos". Por su parte, José Antonio Santana añade que "la media de consumo en Canarias está en 25 kilos, una cantidad que seguramente también se debe en gran parte a los turistas nórdicos".