Jueves, 25 de marzo.
La Consejera de Medio Ambiente del Cabildo de Gran Canaria, Inés Jiménez, acompañada de técnicos de su área, del Jardín canario y Viveros de Gran Canaria, visitó ayer el Barranco de Guayadeque, donde fue recibida por la Concejala de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Ingenio, Minerva Artiles, y posteriormente también por el Concejal de Obras Públicas del Ayuntamiento de Agüimes, Efraín González, para conocer el estado de la Kunkeliella Canariensis, una planta endémica que únicamente se localiza en esta zona de la Comarca del Sureste, y trabajar en la recuperación del Camino de las Bestias.
En cuanto a la planta conocida popularmente como Escobilla de Guayadeque o Garbancera, existe un escaso número de ejemplares localizados en el Barranco de Guayadeque, por lo que al ser el único lugar del mundo en la que se encuentra, su estado de conservación es fundamental para su supervivencia y, de ahí, que se continúe trabajando para que no se pierda.
A este respecto, Jiménez señaló que "aunque está siendo complicado porque la sequía de los últimos años ha hecho que merme la vegetación en toda la isla, nos vamos con una imagen muy positiva y con la sensación de que los ejemplares se siguen manteniendo".
Por su parte, el responsable de Viveros de Gran Canaria, Juan García, apuntó que "nos hemos llevado una muy buena impresión porque vemos que hay reclutamiento y aparecen nuevos ejemplares, y todo ello, unido al esfuerzo que se está realizando para propagarla en el vivero, apuntalará un plan de recuperación exitoso y con futuro", y añadió que lo que se necesita es que quienes visiten este paraje muestren "el máximo respeto y tengan en cuenta al valor que tiene al ser una planta única en el planeta".
Finalmente, la edil ingeniense, Minerva Artiles, agradeció la visita y el trabajo de conservación que se está realizando e hizo un llamamiento a la concienciación, afirmando que "tenemos que seguir, dijo, trabajando en ello, protegerla de aquellos depredadores, tanto naturales como de senderistas, o de prácticas de la acción humana que dificultan su reproducción".
En cuanto al Camino de las Bestias, se trata de diversos senderos por los que transitaban los animales cargados de alimentos de una parte a otra de la isla, comunicando la cumbre con el sureste, y que aún conservan parte de su empedrado original.
En la recuperación del mismo están trabajando de manera conjunta el Cabildo de Gran Canaria y los ayuntamientos de Ingenio y Agüimes con el fin de ponerlo en valor y uso.
"Este camino, manifestó Inés Jiménez, forma parte de la identidad de nuestra tierra, de cómo se trasladaba nuestra gente y de los sacrificios que hacían para comunicarse y hacer trueques entre las poblaciones, motivo por el que queremos darle el valor que se merece para que lo puedan conocer senderistas, caminantes y cualquier persona que lo desee".
Estos trabajos no consistirán solo en la recuperación del camino, sino también de señalizarlo con balizas y mesas interpretativas, entre otros aspectos, para ofrecer un recurso más para disfrutar de nuestro entorno y, con ello, desmasificar algunas zonas naturales, dando la oportunidad a la ciudadanía de conocer, proteger y amar nuestra naturaleza.
