Lunes, 13 de octubre.
Redacción
El Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación del Gobierno de España, a través de la Sociedad Estatal de Infraestructuras Agrarias (Seiasa), tiene en ejecución nueve obras de modernización de regadíos en Canarias que, con una inversión de 79 millones de euros, y en el marco del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, afectan a algo más de 2.500 hectáreas.
Los trabajos se desarrollan en seis islas y suponen la mayor inversión realizada en el archipiélago en materia de modernización de regadíos, y el objetivo es aprovechar cada gota de agua y aumentar los recursos disponibles de fuentes convencionales y alternativas como la desalación marina, la depuración de aguas salobres o las aguas regeneradas.
Las obras permitirán una agricultura de futuro abastecida con energías renovables gracias a la importante reducción de emisiones contaminantes y de costes de explotación.
La Secretaria de Estado de Agricultura y Alimentación, Begoña García, ha subrayado que el regadío canario modernizado asegura el futuro de mujeres y jóvenes rurales, así como un sector eficiente, resiliente y adaptado a las tecnologías.
En relación a Gran Canaria, se ejecuta un proyecto para fomentar el uso de aguas regeneradas para el riego mediante la construcción de un depósito de regulación que permita almacenar aguas procedentes de la Estación de Aguas Residuales (EDAR) de Barranco Seco, en Las Palmas de Gran Canaria, para asegurar el suministro, incluso en los meses de mayor demanda.
Las obras, con un presupuesto de 6,13 millones de euros, beneficiarán a noventa y cuatro regantes y 252 hectáreas en los muncipios de Las Palmas de Gran Canaria, Telde, Ingenio, Agúimes y San Bartolomé de Tirajana.
Los trabajos se desarrollan en seis islas y suponen la mayor inversión realizada en el archipiélago en materia de modernización de regadíos, y el objetivo es aprovechar cada gota de agua y aumentar los recursos disponibles de fuentes convencionales y alternativas como la desalación marina, la depuración de aguas salobres o las aguas regeneradas.
Las obras permitirán una agricultura de futuro abastecida con energías renovables gracias a la importante reducción de emisiones contaminantes y de costes de explotación.
La Secretaria de Estado de Agricultura y Alimentación, Begoña García, ha subrayado que el regadío canario modernizado asegura el futuro de mujeres y jóvenes rurales, así como un sector eficiente, resiliente y adaptado a las tecnologías.
En relación a Gran Canaria, se ejecuta un proyecto para fomentar el uso de aguas regeneradas para el riego mediante la construcción de un depósito de regulación que permita almacenar aguas procedentes de la Estación de Aguas Residuales (EDAR) de Barranco Seco, en Las Palmas de Gran Canaria, para asegurar el suministro, incluso en los meses de mayor demanda.
Las obras, con un presupuesto de 6,13 millones de euros, beneficiarán a noventa y cuatro regantes y 252 hectáreas en los muncipios de Las Palmas de Gran Canaria, Telde, Ingenio, Agúimes y San Bartolomé de Tirajana.