Carlos Gallo*
Como seres humanos que somos, tenemos un mismo
destino, con la única diferencia de la edad en que sucede y en forma habitual y
normal todos los parientes, amigos, vecinos y conocidos se acercan al tanatorio
con la finalidad de dar el último adiós al fallecido y las condolencias a los
deudos.
Es un evento muy habitual y trascendental para la
población de mayor edad y genera un disgusto de envergadura cuando no conocen
la noticia antes que finalice el velatorio, circunstancia que en la actualidad
está sucediendo muchas veces en el Cruce de Arinaga (población que utilizo de
referencia en esta opinión) y es como consecuencia de la ubicación física del
tanatorio que se encuentra en un sitio muy poco visible para la población en
general y de esa forma estar al tanto de las personas que han fallecido.
Una persona que conozco desde hace unos 25 años
me comentó que mientras el tanatorio estuvo junto a la Iglesia del Cruce de
Arinaga toda la población estaba al tanto de las defunciones acaecidas en el
pueblo, pero que en la actualidad es muy difícil conocer esas noticias, puesto
que el tanatorio se encuentra en una zona algo escondida.
Teniendo en cuenta esta importante necesidad, que
inquieta a un gran porcentaje de la población y utilizando como ejemplo la
población donde resido, propongo una posible solución, que consiste en:
Colocar un cartel luminoso en alguna de las
paredes del centro comercial La
Zafra, para que la oficina del Ayuntamiento existente en el
sitio, pueda notificar a toda persona que pasa por la Avenida Ansite de
la existencia de una defunción en el pueblo, con la identificación de la
persona en cuestión, cuando los deudos autorizan la mencionada notificación y
sin identificarla en caso contrario.
La notificación debería mantenerse como mínimo mientras
dura el velatorio.
Es evidente que en cada población existen sitios
claves para facilitar estas informaciones y que la instalación e implementación
de este servicio municipal estarán facilitadas con la utilización de las nuevas
tecnologías existentes.
*Carlos Gallo es vecino de Cruce de Arinaga (morongps@hotmail.com)
