La Guardia Civil de Agüimes ha procedido a la investigación de dos personas de nacionalidad española por ser los presuntos autores de la sustracción de las cartas de un vecino, incurriendo así en la autoría de un delito de descubrimiento y revelación de secretos.
La investigación se inició el pasado 27 de junio a través de la interposición de una denuncia en la que se ponía en conocimiento de la Guardia Civil una serie de irregularidades detectadas en la correspondencia depositada en el buzón del la víctima.
Esta persona informaba a los agentes que pudo comprobar a primera hora de la mañana la existencia de una carta, de la cual era titular, que dejó depositada en el buzón para ser recogida a la vuelta de la jornada laboral, comprobando posteriormente que había desaparecido.
Al tener sospechas fundadas sobre el presunto autor, la víctima realizó una carta dirigida hacia sí mismo al objeto de comprobar que efectivamente le estaban robando la correspondencia.
En la misma se dirigía a las personas que presuntamente perpetraban el delito, advirtiéndoles de las consecuencias legales que conllevarían estos hechos, detallados concretamente en el artículo 197 del Código Penal y que establece penas de prisión y multa de doce a veinticuatro meses por descubrir los secretos o vulnerar la intimidad de otro, sin su consentimiento.
La referida carta la depositó en su propio buzón en un sobre cerrado y con remitente, pudiendo comprobar horas más tarde que la carta ya no estaba allí depositada y que la habían sustraído, motivo por el que una vez comprobada la comisión del delito sospechado lo puso en conocimiento de la Guardia Civil de Agüimes.
Por todo ello, la Guardia Civil de Agüimes realizó las correspondientes diligencias y pesquisas policiales basadas en la toma de manifestación de dos personas residentes en el mismo edificio, pudiendo comprobar cómo uno de los investigados había sustraído presuntamente las cartas, teniendo además conocimiento su pareja de este ilícito, motivo por el que se les imputa la autoría de un delito de descubrimiento y revelación de secretos.
El Código Penal establece penas de uno a cuatro años de prisión o multa de doce a veinticuatro meses el que, para descubrir los secretos o vulnerar la intimidad de otro, sin su consentimiento, se apodere de sus papeles, cartas, mensajes de correo electrónico o cualquiera otros documentos o efectos personales, intercepte sus telecomunicaciones o utilice artificios técnicos de escucha, transmisión, grabación o reproducción del sonido o la imagen, o cualquier otra señal de comunicación.