Artículo publicado ayer en el Canarias 7.
La aprobación del Plan Especial del Paisaje Protegido de la Montaña de Agüimes pone en peligro, a juicio del Ayuntamiento, la comunicación de la zona sur y sureste, al impedir la construcción de antenas y repetidores.
La Concejala de Urbanismo, Adriana del Busto, ya advirtió, durante el periodo de alegaciones del Plan, del peligro que podían suponer las restricciones previstas para la ubicación de sistemas de telecomunicación en el perímetro de 285 hectáreas que ocupa el Paisaje Protegido. Sin embargo, la aprobación definitiva del documento no ha recogido las alegaciones municipales. Eso significa que las nuevas normas de conservación incluyen, como usos prohibidos en el perímetro de protección, la instalación de tendidos eléctricos y telefónicos, además de la construcción de infraestructuras de comunicación, como antenas y repetidores. Esto supone, como recordó la responsable municipal de Urbanismo, que "ya no será posible instalar nuevas antenas o sustituir las actuales en caso de desperfecto, lo que generará una lógica pérdida de cobertura". La situación es más grave de lo que parece. Y es que, según confirmó Adriana del Busto, "no sólo la comarca sureste depende de estas instalaciones, sino también la zona sur de la Isla que, a partir de ahora, deberá basar su comunicación en las instalaciones de Los Pechos". A pesar de todo, el Ayuntamiento ha comunicado que su intención no es impugnar el plan, una vez rechazadas sus alegaciones. La estrategia se basará en emprender contactos con la Dirección General de Aviación Civil, que fue el organismo que influyó en las distintas restricciones del Plan, por considerar que las antenas ubicadas en la cima de la Montaña de Agüimes obstaculizaban los aterrizajes de las aeronaves. El objetivo municipal es llegar a algún tipo de acuerdo que pueda llevar posteriormente a la modificación de las normas de conservación del Paisaje Protegido.
La Concejala de Urbanismo, Adriana del Busto, ya advirtió, durante el periodo de alegaciones del Plan, del peligro que podían suponer las restricciones previstas para la ubicación de sistemas de telecomunicación en el perímetro de 285 hectáreas que ocupa el Paisaje Protegido. Sin embargo, la aprobación definitiva del documento no ha recogido las alegaciones municipales. Eso significa que las nuevas normas de conservación incluyen, como usos prohibidos en el perímetro de protección, la instalación de tendidos eléctricos y telefónicos, además de la construcción de infraestructuras de comunicación, como antenas y repetidores. Esto supone, como recordó la responsable municipal de Urbanismo, que "ya no será posible instalar nuevas antenas o sustituir las actuales en caso de desperfecto, lo que generará una lógica pérdida de cobertura". La situación es más grave de lo que parece. Y es que, según confirmó Adriana del Busto, "no sólo la comarca sureste depende de estas instalaciones, sino también la zona sur de la Isla que, a partir de ahora, deberá basar su comunicación en las instalaciones de Los Pechos". A pesar de todo, el Ayuntamiento ha comunicado que su intención no es impugnar el plan, una vez rechazadas sus alegaciones. La estrategia se basará en emprender contactos con la Dirección General de Aviación Civil, que fue el organismo que influyó en las distintas restricciones del Plan, por considerar que las antenas ubicadas en la cima de la Montaña de Agüimes obstaculizaban los aterrizajes de las aeronaves. El objetivo municipal es llegar a algún tipo de acuerdo que pueda llevar posteriormente a la modificación de las normas de conservación del Paisaje Protegido.
Fotografía: Repetidores de telefonía, radio y televisión en la Montaña de Agüimes.
