La estación rupestre del Macizo de Balos, en el municipio de Agüimes, fue atacado este viernes, quedando destrozado uno de sus paneles más interesantes según los especialistas.
Varias personas la emprendieron a golpes con el yacimiento grancanario, convirtiendo en añicos un panel grabado de un metro cuadrado de superficie, que contenía grafías geométricas y alfabetiformes líbicos.
Este asentamiento del Macizo de Balos pasa por ser, junto a la Cueva Pintada de Gáldar, uno de los más paradigmáticos del pasado preeuropeo de Gran Canaria.
El profesor de Historia Ernesto Martín considera, después de este ataque al patrimonio histórico del municipio de Agüimes, que "de unos años a esta parte las islas parecen haber emprendido un viaje sin retorno a ninguna parte, pues parece que es ahí donde conduce el proceso de degradación que presenta el patrimonio natural y cultural del Archipiélago".
Varias personas la emprendieron a golpes con el yacimiento grancanario, convirtiendo en añicos un panel grabado de un metro cuadrado de superficie, que contenía grafías geométricas y alfabetiformes líbicos.
Este asentamiento del Macizo de Balos pasa por ser, junto a la Cueva Pintada de Gáldar, uno de los más paradigmáticos del pasado preeuropeo de Gran Canaria.
El profesor de Historia Ernesto Martín considera, después de este ataque al patrimonio histórico del municipio de Agüimes, que "de unos años a esta parte las islas parecen haber emprendido un viaje sin retorno a ninguna parte, pues parece que es ahí donde conduce el proceso de degradación que presenta el patrimonio natural y cultural del Archipiélago".
Fotografía: En la imagen, tomada del diario www.canariasahora.es, se muestra el estado en que quedó el panel tras el acto vandálico.
Fuente: www.canariasahora.es