La familia del niño grancanario Yéremi Vargas, de 7 años, no abandona la esperanza de encontrarlo, al cumplirse tres meses de su desaparición cuando jugaba cerca de su casa, en Los Llanos, en el sureste de Gran Canaria.La madre del pequeño, Ithaysa Suárez, manifestó el pasado domingo que, aunque la familia está muy mal porque ya se han cumplido tres meses desde que el niño desapareciese y no hay ninguna pista fiable sobre su paradero, mantiene viva la esperanza de encontrarlo con vida. También aseguró que, aunque algunas informaciones relacionan la desaparición de Yéremi y la de la niña británica Madeleine McCann en el sur de Portugal, los investigadores les han indicado que, de momento, no existe ninguna prueba que permita relacionar ambos casos. En ese mismo sentido, se expresó ayer el Delegado del Gobierno en Canarias, José Segura, quien en rueda de prensa consideró "que no tiene lógica vincular la desaparición del niño grancanario con la pequeña británica", puntualizando además que no se ha abandonado la investigación, sino que, por el contrario, se trabaja en ella "con toda intensidad".
Yéremi Vargas desapareció el 10 de marzo pasado cuando jugaba con unos primos en un solar próximo a las viviendas de su abuela y de su tía, y en su búsqueda se desplegó el mayor dispositivo que ha vivido Gran Canaria con cientos de voluntarios. Miles de personas participaron, además, en sendas concentraciones de apoyo a la familia y para pedir que se resolviera el caso. La desaparición de Yéremi Vargas se suma a la de la joven de 14 años Sara Morales, ocurrida el 30 de julio de 2006 tras salir de su casa en Las Palmas de Gran Canaria para una cita a la que no llegó.
