Diez inmigrantes de origen magrebí han muerto en la Playa de Arinaga, tras naufragar la patera en la que viajaban cuando restaban unos 20 metros para llegar a la orilla, en la zona del Risco Verde.
Uno de los ocho supervivientes, dos de ellos continúan siendo buscados, relató a la Guardia Civil que se habían guiado por la luz del Faro de Arinaga, situado en las inmediaciones del lugar. Cuando creían que se encontraban ya en la orilla se lanzaron al agua, aunque en realidad, según relató el sargento Machín, del G.E.A.S., se encontraban encima de una roca de basalto y unos dos metros de profundidad, "cayendo como piedras al mar".
Entre los supervivientes, dos se encuentran hospitalizados aquejados de cuadros de hipotermia e hipoglucemias leves.
En la costa del Risco Verde se desplegó un amplio dispositivo de búsqueda en el que participaron un helicóptero de la Guardia Civil, la patrullera Báltico del mismo cuerpo y patrullas terrestres. A estos medios se suman, según dijo e Efe un portavoz de la sociedad estatal, una embarcación de Salvamento Marítimo, que también ha desplazado a la zona al helicóptero Helimer Canarias, efectivos del Grupo Especial de Actividades Subacuáticas de la Guardia Civil (GEAS) y sanitarios de Cruz Roja y del Servicio de Urgencias Canario (SUC).
Fotografía: Rescate de uno de los cadáveres.