Sureste Digital
En la tarde de ayer, un grupo de senderistas que transitaban por las inmediaciones del Roque Aguayro, en el barrio de Los Corralillos, alertaron a la Guardia Civil tras encontrar restos de lo que podía ser un artefacto explosivo.
En el lugar se personó una patrulla del Puesto Principal de la Guardia Civil de Agüimes y agentes especialistas en la desactivación de explosivos.
Tras examinar minuciosamente los restos encontrados, se comprobó que se trataba de material oxidado que podían ser de una granada y que no suponía ningún peligro, por lo que se descartó la desactivación de los mismos y se procedió a su traslado a dependencias del instituto armado, donde se investigarán los datos que permita esclarecer el tipo de artefacto del que se trata, así como su procedencia y fecha en la que llegó a la zona.