Sureste Digital
Por motivos que aún se desconocen, un hombre de 46 años, que responde a las iniciales F.S.R., agredió, pasadas las 17.00 horas de ayer, en Montaña Los Vélez, a un vecino de la zona, identificado como A.S.V., de 55 años, hiriéndole en el costado izquierdo con un arma blanca.
Tras el apuñalamiento, el herido corrió a refugiarse y pedir ayuda en un concesionario de coches cercano y, según algunos testigos, el agresor, después de lo ocurrido, se subió a su coche y dio varias vueltas a la manzana, en las que aprovechó para deshacerse del arma, hasta que finalmente fue detenido por la Guardia Civil.
Tras el apuñalamiento, el herido corrió a refugiarse y pedir ayuda en un concesionario de coches cercano y, según algunos testigos, el agresor, después de lo ocurrido, se subió a su coche y dio varias vueltas a la manzana, en las que aprovechó para deshacerse del arma, hasta que finalmente fue detenido por la Guardia Civil.
Hasta el lugar se trasladaron varias patrullas de la Policía Local y Guardia Civil de Agüimes que acordonaron la zona y se encargaron de instruir las diligencias oportunas.
Los agentes de la Guardia Civil dieron una batida a pie para buscar el arma blanca, encontrandola a unos 200 metros del lugar donde se produjo la agresión.
En un primer momento, el herido fue atendido por una unidad básica del Servico de Urgencias Canario (SUC), hasta la llegada de una ambulancia medicalizada que se encargaría de trasladar al hombre hasta el Hospital Insular.
Todo este incidente desató la ira y rabia de los familiares, por lo que fue necesaria la intervención policial para evitar otro enfrentamiento, ya que la mujer del agresor trabaja en un bar próximo al lugar de los hechos.
En un primer momento, el herido fue atendido por una unidad básica del Servico de Urgencias Canario (SUC), hasta la llegada de una ambulancia medicalizada que se encargaría de trasladar al hombre hasta el Hospital Insular.
Todo este incidente desató la ira y rabia de los familiares, por lo que fue necesaria la intervención policial para evitar otro enfrentamiento, ya que la mujer del agresor trabaja en un bar próximo al lugar de los hechos.
Fotografía: El agresor, tras ser detenido por los agentes de la Guardia Civil. (Borja Suárez)