Canarias7El Alcalde de Agüimes, Antonio Morales, advirtió el martes a la nueva Viceconsejera de Industria del Gobierno de Canarias, Francisca Luengo, que no habrá negociación para instalar la planta de gas en Arinaga. Reiteró que su apuesta es por las energías limpias y considera innecesaria la implantación de una regasificadora en la isla.
Morales respondió así a Francisca Luengo, quien después de tomar posesión de su cargo, esta misma semana, anunció que en seis meses llevará al Parlamento una revisión del Plan Energético de Canarias (Pecan) en la que se abordará la ubicación de las dos plantas regasificadoras para las islas.
Después de señalar que mantiene "muy buena relación" con Luengo "desde hace muchísimo tiempo" y manifestar su convencimiento de que "no habrá crispación y sí entendimiento", el Alcalde de Agüimes se mostró tajante al señalar que "no habrá planta de gas en Arinaga, ni en Pozo Izquierdo (Santa Lucía), ni en Juan Grande (San Bartolomé de Tirajana)". Su posición es que no se deben ubicar estas instalaciones cerca de ningún núcleo poblacional. En este asunto, añadió, "no habrá acuerdo".
Insistió Antonio Morales en que la relación con la nueva dirección de la Consejería de Industria será diferente a la mantenida hasta ahora con este departamento del Gobierno de Canarias. Sin embargo, advirtió que no se sentará a hablar sobre este asunto si la posición del Ejecutivo canario es la zona de Arinaga "porque eso lo tenemos claro. Ahí no".
Apostilló que si son llamados a negociar "no expondremos ninguna alternativa ni daremos ninguna respuesta, porque la posición que hemos defendido es contraria a la instalación del gas en Canarias porque entendemos que no es necesario".
En cualquier caso, destacó que el Cabildo de Gran Canaria ya hizo una proposición al respecto, que fue ubicar la planta regasificadora mar adentro (off shore) y que no fue retomada.
Esta iniciativa de la corporación insular planteaba instalar la planta a kilómetro y medio, como mínimo, de la costa, enfrente de Juan Grande. La plataforma, según la propuesta realizada en el mandato anterior, dispondría de un dique fijo y el espacio necesario para que el barco gasero desarrolle su función.
Los dirigentes del Cabildo de Gran Canaria (PSC-PSOE y Nueva Canarias) entendían en aquel momento que ésta era una posibilidad viable, aunque encarecería el proyecto. Sin embargo, aunque el coste económico era asumible y tecnológicamente viable, el margen de beneficios para los socios sería menor.
Antonio Morales volvió a dejar claro que su posición siempre ha sido contraria a la instalación del gas en Gran Canaria por entender que "no es necesario". A su juicio, las energías renovables "son, además de más limpias, más baratas".
A este respecto, el primer edil de Agüimes señaló que la instalación de las regasificadoras en Canarias obedecen al interés de las compañías eléctricas de sacar rentabilidad a las inversiones en ciclos combinados.
Por este motivo, considera que "el gas hipotecaría el futuro de la central hidroeléctrica" que se construirá entre las presas de Chira y Soria, e igualmente haría peligrar el futuro de la energía eólica como alternativa.
En este punto, se mostró convencido de que "Endesa, adjudicataria de la concesión del proyecto, no construirá la central si finalmente hay gas en la isla". La compañía prevé iniciar los trabajos en un año, aproximadamente, y acabarlos en unos tres más, de tal manera que, según la previsiones del Cabildo de Gran Canaria, las obras podrían estar finalizadas en 2017 y la inversión realizada ascendería a unos 280 millones de euros.
En cualquier caso, Morales reiteró que, sea cual sea la decisión del Gobierno de Canarias, "no cabe diálogo o consenso sobre Arinaga".
Fotografía: Imagen cedida por Infosureste.
Morales respondió así a Francisca Luengo, quien después de tomar posesión de su cargo, esta misma semana, anunció que en seis meses llevará al Parlamento una revisión del Plan Energético de Canarias (Pecan) en la que se abordará la ubicación de las dos plantas regasificadoras para las islas.
Después de señalar que mantiene "muy buena relación" con Luengo "desde hace muchísimo tiempo" y manifestar su convencimiento de que "no habrá crispación y sí entendimiento", el Alcalde de Agüimes se mostró tajante al señalar que "no habrá planta de gas en Arinaga, ni en Pozo Izquierdo (Santa Lucía), ni en Juan Grande (San Bartolomé de Tirajana)". Su posición es que no se deben ubicar estas instalaciones cerca de ningún núcleo poblacional. En este asunto, añadió, "no habrá acuerdo".
Insistió Antonio Morales en que la relación con la nueva dirección de la Consejería de Industria será diferente a la mantenida hasta ahora con este departamento del Gobierno de Canarias. Sin embargo, advirtió que no se sentará a hablar sobre este asunto si la posición del Ejecutivo canario es la zona de Arinaga "porque eso lo tenemos claro. Ahí no".
Apostilló que si son llamados a negociar "no expondremos ninguna alternativa ni daremos ninguna respuesta, porque la posición que hemos defendido es contraria a la instalación del gas en Canarias porque entendemos que no es necesario".
En cualquier caso, destacó que el Cabildo de Gran Canaria ya hizo una proposición al respecto, que fue ubicar la planta regasificadora mar adentro (off shore) y que no fue retomada.
Esta iniciativa de la corporación insular planteaba instalar la planta a kilómetro y medio, como mínimo, de la costa, enfrente de Juan Grande. La plataforma, según la propuesta realizada en el mandato anterior, dispondría de un dique fijo y el espacio necesario para que el barco gasero desarrolle su función.
Los dirigentes del Cabildo de Gran Canaria (PSC-PSOE y Nueva Canarias) entendían en aquel momento que ésta era una posibilidad viable, aunque encarecería el proyecto. Sin embargo, aunque el coste económico era asumible y tecnológicamente viable, el margen de beneficios para los socios sería menor.
Antonio Morales volvió a dejar claro que su posición siempre ha sido contraria a la instalación del gas en Gran Canaria por entender que "no es necesario". A su juicio, las energías renovables "son, además de más limpias, más baratas".
A este respecto, el primer edil de Agüimes señaló que la instalación de las regasificadoras en Canarias obedecen al interés de las compañías eléctricas de sacar rentabilidad a las inversiones en ciclos combinados.
Por este motivo, considera que "el gas hipotecaría el futuro de la central hidroeléctrica" que se construirá entre las presas de Chira y Soria, e igualmente haría peligrar el futuro de la energía eólica como alternativa.
En este punto, se mostró convencido de que "Endesa, adjudicataria de la concesión del proyecto, no construirá la central si finalmente hay gas en la isla". La compañía prevé iniciar los trabajos en un año, aproximadamente, y acabarlos en unos tres más, de tal manera que, según la previsiones del Cabildo de Gran Canaria, las obras podrían estar finalizadas en 2017 y la inversión realizada ascendería a unos 280 millones de euros.
En cualquier caso, Morales reiteró que, sea cual sea la decisión del Gobierno de Canarias, "no cabe diálogo o consenso sobre Arinaga".
Fotografía: Imagen cedida por Infosureste.
