Lizardo Martell*
Hace unos días, el Alcalde de Agüimes, Antonio Morales, publicó unos artículos manifestando su "asombro y espanto", ante el apoyo mayoritario en muchos lugares a la derecha, a pesar que, en su opinión, era la responsable de la grave crisis que padecemos y de la pérdida de derechos y libertades.
Desde el respeto y afecto a la persona y el reconocimiento a su buena gestión como alcalde, quiero expresar mi desacuerdo, si bien declaro previamente, porque le conozco bien, que con independencia de las interpretaciones que puedan hacerse de sus reflexiones y análisis, es un demócrata y acepta el resultado de las elecciones.
Está comprobado que cuando defendemos el interés general, casi siempre coincide con nuestro interés personal o con nuestras ideas y, en esta ocasión, es así, tanto para él como para mí.
Pensar que la crisis es culpa sólo de la derecha no es válido ni correcto pues, en mayor o menor grado, casi todos somos origen simple: "hemos vivido por encima de nuestras posibilidades". Ciudadanos, corporaciones locales, gobiernos autónomos y gobierno central, tanto cuando ha gobernado la derecha, como la izquierda o el centro. "Entre todos creamos la deuda y ahora ella, nos está matando".
Dando un paso más atrás, cuando llegó la democracia, los ciudadanos apostaron por los derechos y no por las obligaciones y los políticos, para ganar las elecciones, lo fomentaron.
En las familias y en las empresas, cuando hay responsabilidad, se gasta en relación con lo que se gana, con independencia que haya quien prestara dinero fácil. Y eso es así, porque al existir continuidad, la responsabilidad de las decisiones las asume quien las toma, pero ¿qué pasa en la administración pública? Todos lo sabemos: no tienen ninguna responsabilidad los gestores políticos que cesan en sus cargos y dejan a las instituciones endeudadas.
*Lizardo Martell es Consejero Delegado de Vidrieras Canarias y Consejero de Ahemón.
Hace unos días, el Alcalde de Agüimes, Antonio Morales, publicó unos artículos manifestando su "asombro y espanto", ante el apoyo mayoritario en muchos lugares a la derecha, a pesar que, en su opinión, era la responsable de la grave crisis que padecemos y de la pérdida de derechos y libertades.
Desde el respeto y afecto a la persona y el reconocimiento a su buena gestión como alcalde, quiero expresar mi desacuerdo, si bien declaro previamente, porque le conozco bien, que con independencia de las interpretaciones que puedan hacerse de sus reflexiones y análisis, es un demócrata y acepta el resultado de las elecciones.
Está comprobado que cuando defendemos el interés general, casi siempre coincide con nuestro interés personal o con nuestras ideas y, en esta ocasión, es así, tanto para él como para mí.
Pensar que la crisis es culpa sólo de la derecha no es válido ni correcto pues, en mayor o menor grado, casi todos somos origen simple: "hemos vivido por encima de nuestras posibilidades". Ciudadanos, corporaciones locales, gobiernos autónomos y gobierno central, tanto cuando ha gobernado la derecha, como la izquierda o el centro. "Entre todos creamos la deuda y ahora ella, nos está matando".
Dando un paso más atrás, cuando llegó la democracia, los ciudadanos apostaron por los derechos y no por las obligaciones y los políticos, para ganar las elecciones, lo fomentaron.
En las familias y en las empresas, cuando hay responsabilidad, se gasta en relación con lo que se gana, con independencia que haya quien prestara dinero fácil. Y eso es así, porque al existir continuidad, la responsabilidad de las decisiones las asume quien las toma, pero ¿qué pasa en la administración pública? Todos lo sabemos: no tienen ninguna responsabilidad los gestores políticos que cesan en sus cargos y dejan a las instituciones endeudadas.
*Lizardo Martell es Consejero Delegado de Vidrieras Canarias y Consejero de Ahemón.