Ladera en la que se encuentra el talud que será demolido |
La Provincia
La Comisión
Insular de Patrimonio Histórico de Gran Canaria dio ayer luz
verde a la demolición del talud que ha obligado a cerrar la carretera de
Temisas, aunque el informe técnico de los arqueólogos recoge 18 condicionantes
para preservar el yacimiento de las Cuevas y Graneros de la Audiencia, declarado
como Bien de Interés Cultural (BIC) de la isla.
La Comisión
se reunió con carácter urgente y extraordinario tras las protestas de los
vecinos por el cierre total de la vía GC-500, que les obliga a dar un rodeo de
40 minutos para entrar o salir de la localidad. El corte de la carretera
desencadenó el martes un altercado entre algunos vecinos y agentes de la Guardia Civil, que
concluyó con la detención de cuatro personas.
Tras conocer el informe arqueológico y la propuesta de la Consejería de Obras
Públicas del Cabildo, la
Comisión de Patrimonio Histórico autorizó a este último
departamento a redactar el proyecto de demolición del talud inestable, situado
junto al yacimiento y a unos 800
metros de Temisas. El arqueólogo José de León, portavoz
de la comisión,
calculó que la demolición podría llevarse a cabo en una o dos semanas, aunque
con condicionantes para garantizar la conservación del patrimonio. Entre ellos,
que un arqueólogo esté siempre junto a la maquinaria, que se evite la caída de
residuos sobre las tres cuevas que están bajo el talud y que haya un control de
las vibraciones sobre todo el yacimiento.
José de León explicó que la demolición es la única opción para acabar con la
peligrosidad de una parte del risco, tanto para los vecinos que transitan por
allí como para el propio yacimiento, pues un derrumbe natural podría sepultar
las cuevas. Además, la demolición solo afectaría a una zona pequeña del BIC y
no precisamente la más rica en restos arqueológicos.
Por otra parte, el colectivo de vecinos de Temisas presentó ayer un escrito
y 140 firmas al Consejero de Obras Públicas del Cabildo de Gran Canaria, Carlos Sánchez, en que le
solicita una rápida solución al cierre de la carretera y le emplaza a
rectificar sus declaraciones a los medios de comunicación. La plataforma
asegura que los vecinos no retiraron la valla y atribuye las detenciones a una
actuación "desmedida" de la Guardia Civil, tal como denunció el jueves el
portavoz Miguel Méndez.
"Los vecinos del pueblo, después de la situación vivida en las
últimas
semanas, pensábamos que después de haber hablado y siendo informados por
el Director Insular de Carreteras, Juan Antonio Ferrera, venía usted a
poner paz y
remedio a la situación, pero no ha sido así, sino que ha encrespado los
ánimos
acusando a los vecinos de las aperturas de la carretera", señala el
escrito del colectivo, que también afirma que "la Guardia Civil no ha
detenido a nadie quitando la valla ni se ha utilizado ningún tractor".
Respecto al incendio del pasado sábado, que obligó a abrir la carretera con
el tractor de un vecino para que pasaran los equipos de emergencia, los vecinos resaltaron que "ni el Cecoes ni el Cecopin tenían conocimiento de
la situación del pueblo cuando la isla estaba en alerta por 40 grados de temperatura, nadie
había pensado en las medidas de evacuación".