De izquierda a derecha, Jesús Vega, Pedro Herránz, Antonio Morales y Rita Estévez, en el momento de descubrir el cartel de la tienda |
Ayer se inauguró en el Centro Comercial La Zafra, en el Cruce de Arinaga, un punto de venta del material que se trabaja en el Proyecto Tabita, puesto en marcha por Cáritas, que se une a los existentes en Lomo Blanco y La Isleta, en Las Palmas de Gran Canaria, Vecindario e Ingenio.
En el acto de inauguración estuvieron presentes el Alcalde de Agüimes, Antonio Morales, la Concejala de Servicios Sociales del Ayuntamiento de Agüimes, Rita Estévez, el presidente y la gerente de la Fundación Cáritas por la Integración Sociolaboral, Pedro Herranz y Cira Santana, respectivamente, y el párroco de San José Obrero del Cruce de Arinaga, Jesús Vega.
Este punto de venta, ubicado en el local 12 del Centro Comercial La Zafra, cedido por el Ayuntamiento de Agüimes a la Parroquia de San José Obrero del Cruce de Arinaga, que abrirá al público los martes y jueves, de 10.00 a 13.00 horas, estará dinamizado por voluntarios-as de Cáritas, y tendrá a la venta ropa de segunda mano, productos artesanales realizados con ropa reciclada, elaborados por el Proyecto Tabita, y ropa nueva elaborada por Impulsa Tabita.
El Alcalde de Agüimes, Antonio Morales, señaló en el acto de inauguración que "ante la desprotección del Estado, es bueno que vivamos un momento de solidaridad como este. Gracias a personas como Pedro, Suso y el voluntariado de Cáritas, añadió, los más desfavorecidos tienen una esperanza y, por otra parte, vemos cómo derrochamos cosas que son perfectamente aprovechables y, por eso, es tan importante esta labor que, ojalá, tenga muchos éxitos".
El párroco de San José Obrero, Jesús Vega, dijo que le impresionó "la rapidez del alcalde por adjudicar un local para este fin, y lo agradezco mucho". También se mostró muy orgulloso por la inauguración de la tienda porque "significa dignidad para la persona, ya que la ropa de segunda mano te la encuentras en perfecto estado, lavada y planchada y, de esta manera, ayudamos a un proyecto de formación. Es como una cadena, ya que en Cáritas, cuando alguien necesita ropa, le damos un vale para que vengan a comprarla y así no se sienten tan mal", puntualizó.
La Fundación Cáritas por la Integración Sociolaboral, que tiene en marcha desde el año 2006 el "Proyecto Tabita, reciclando y reutilizando ropa usada", pretende, a través de la formación y la capacitación profesional, integrar a aquellas personas en situación o riesgo de exclusión social, así como ser un recurso medioambiental con el reciclado y reutilización de la ropa usada que se recoge en la isla.
Numerosas personas, entre voluntarios-as de Cáritas y vecinos-as del Cruce de Arinaga realizaron las primeras compras en la nueva tienda |
Para ello, el Proyecto Tabita favorece un proceso educativo integral que fomente el desarrollo personal del alumno-a; capacita al alumnado profesionalmente en los perfiles profesionales de selección de ropa, lavandería, planchado, gestión de stocks y almacenes, arreglos de costuras, etc.; ofrece una formación ocupacional necesaria para la reinserción laboral; potencia la adquisición de herramientas que faciliten la inserción sociolaboral del alumnado; asesora y orienta hacia aquellos recursos y alternativas que den respuesta a las necesidades de los alumnos-as, contribuyendo a una mejora de sus condiciones de vida; y establece acciones socioeducativas con el fin de potenciar las capacidades personales de los alumnos-as del proyecto.
Para la consecución de estos objetivos, el Proyecto Tabita lleva a cabo un taller de reciclado y reutilización de ropa, que se desarrolla en Lomo Blanco, en Las Palmas de Gran Canaria, al que acude un grupo de alumnos-as que percibe una beca salario y beca transporte por su participación y trabajo que realizan.
En el centro se lleva a cabo, por una parte, un plan formativo ocupacional con fin de capacitar al alumno-a en el ramo de la lavandería y atención al cliente mediante el tratamiento de ropa consistente en su recuperación (lavado-desinfectado, planchado y etiquetado de la prendas) y su reciclaje, fabricando trapos de limpieza y traperas.
El producto fruto del trabajo es ropa de segunda mano recuperada y en perfecto estado para su uso, traperas elaboradas mediante la técnica artesanal del ganchillo y trapos para la limpieza de barcos o maquinaria.
Los ingresos que se reciben por la venta de estos productos se reinvierten en la marcha general del proyecto, ya que las ayudas externas son escasas y es necesario, por tanto, la autofinanciación.
Asimismo, se realizan visitas a los grupos de Cáritas en la isla para dar a conocer el proyecto y ofrecer la posibilidad de colaborar con el mismo y se organizan actividades de sensibilización sobre los beneficios que tiene el reciclado del residuo textil, que van desde la difusión de folletos hasta la presencia en ferias y otros eventos, así como la impartición de charlas en centros educativos.