El acusado, Jorge E. Piedrahita, y el abogado Pedro Sánchez |
Los testigos presenciales no se percataron de que la pedrada que el expolicía colombiano Jorge Enrique Piedrahita tiró a su compatriota Óscar Iván Duque le produjera la muerte, a primera hora del 22 de septiembre de 2012 a la salida de una discoteca en el Polígono Industrial de Arinaga.
La segunda jornada del juicio que se sigue contra el acusado se inició ayer a las 10.00 horas con los testimonios de cinco guardias civiles, que habían acudido al lugar tras advertírseles que se había producido un posible homicidio. Los agentes expresaron cómo se encontraron el cuerpo, su estado ensangrentado y la toma de declaraciones en el lugar, de la que se desprende que ambos habían peleado en el interior del local y se habían tirado piedras en el exterior, causando la última que lanzó el arrestado, desde unos 15 metros, la muerte de Duque.
El primero de los testigos reconoció haber jugado con ambos al sapo, un popular juego colombiano, tras lo cual habían acudido a la discoteca, donde se habían tomado unas seis botellas de aguardiente. "Duque estaba más agresivo; se insultaban y se faltaban el respeto", apuntó durante el interrogatorio, y aseguró que en un primer momento se metió para separarlos. Reconoció, asimismo, que todos estaban bebidos, que habían consumido cocaína y que la discusión comenzó porque el fallecido no había pagado parte de la botella. También señaló que quien comenzó a tirar piedras fue Duque y que, finalmente, Piedrahita, también le tiró una que tumbó a Duque.
A preguntas del abogado Pedro Sánchez, el testigo declaró que el acusado "quiso evitar la pelea", insistió en que fue Duque el primero en tirar piedras y aseguró que se enteró al día siguiente de que Duque estaba muerto.
Parecidas fueron las declaraciones del segundo testigo, que afirmó que no los conocía de nada. "Al final de la rampa vi como Duque tiraba piedras a Jorge y le dije que tuviera cuidado, que me iba a dar a mí, pero siguiendo peleando. Después el hombre (Duque) cayó y no se levantó".
La fiscal le preguntó si el acusado le había advertido que "no has visto nada, tú sabes lo que te pasa", a lo que el testigo contestó que no se acordaba. "Si sentí miedo por haber estado allí, por las represalias", indicó para aclarar sus manifestaciones.
Otros dos amigos de Duque y de Piedrahita reconocieron que dentro de la discoteca hubo una pelea entre ambos, pero que no presenciaron la pelea en el exterior del local.
Hoy seguirá la declaración de los médicos forenses tras lo cual, la fiscal mantendrá o no su propuesta inicial de trece años de cárcel por homicidio más un año y medio de prisión por amenazas, mientras que el abogado Pedro Sánchez piensa mantener la pena de año y medio de prisión por un delito de lesiones con resultado de muerte.