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| Bolsas de la compra repartidas en diferentes puntos del municipio con las recomendaciones para reducir los residuos alimentarios |
Redacción
El Ayuntamiento de Agüimes se suma a la campaña "Más alimento, menos desperdicio", una iniciativa puesta en marcha por el Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente (MAPAMA) para el periodo 2017-2020 con el fin de poner freno a esta situación.
Para ello, recientemente se han entregado gratuitamente en diferentes puntos del municipio material informativo de la campaña y una bolsa que recoge mensajes y consejos para reducir los residuos alimentarios.
Según indican las últimas estimaciones, cada año se desperdician en el planeta 1.300 millones de toneladas de alimentos, un tercio de la producción mundial, con importantes repercusiones económicas, sociales y medioambientales.
Dentro de la Unión Europea, España es el séptimo país que más alimentos tira a la basura, un total de 7,7 millones de toneladas anuales, lo que supone un coste de 3.000 millones de euros, según datos del MAPAMA.
"Más alimento, menos desperdicio" señala que con una cuarta parte de los alimentos que se pierden o desperdician podría alimentarse a la población que pasa hambre en el mundo, y es que una alimento desperdiciado es aquel que, siendo apto para el consumo humano, termina por no comerse, bien por descarte o por deterioro. Se trata, por tanto, de alimentos que se estropean porque no se han conservado bien, productos con la fecha de caducidad sobrepasada, frutas y hortalizas que no se consumen por tener una forma extraña...
El objetivo de la campaña es controlar el desperdicio alimentario en todos los eslabones de la cadena alimentaria para poder aplicar las medidas necesarias en cada uno de ellos, destacando la necesidad de contar con la colaboración de entidades, asociaciones, empresas, productores y consumidores, pilares fundamentales para disminuir los niveles actuales de desperdicio.
Para este año está previsto reducir en un 50% las pérdidas y el desperdicio, tal como marcó la Comisión Europea hace unos años, pero es necesario seguir trabajando para saber, además, cuánto, cómo, dónde y por qué se producen los desperdicios, así como divulgar buenas prácticas y acciones de sensibilización, analizar y revisar aspectos y normativas y fomentar el diseño y desarrollo de nuevas tecnologías.
La tendencia en los últimos años confirma poco a poco la concienciación familiar para no tirar comida, lo que ha permitido reducir en un 6% el desperdicio en los hogares españoles y, para reducir la cantidad, se deben tener en cuenta diez claves fundamentales, según la Guía Práctica para el Consumidor: Cómo Reducir el Desperdicio Alimentario": planificar el menú semanal y evitar improvisaciones; hacer una compra responsable (confeccionar una lista de los necesario); tener en cuenta que "tirar la comida es tirar dinero"; conservar de forma adecuada los alimentos (consultar etiqueta y soportes informativos); adquirir productos de temporada y consumir la comida por orden de entrada (la más antigua primero); ajustar las raciones e intentar cocinar lo justo; aprovechar las sobras con creatividad; tirar a la basura solo lo que sea imposible aprovechar; en los restaurantes pedir las sobras en un envase para llevar; y recordar la importancia de las tres erres ecológicas: reducir (comprar de forma responsable), reutilizar (aprovechar las sobras para otras recetas) y reciclar (con lo residuos orgánicos se puede fabricar un excelente abono para, por ejemplo, las plantas).
