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| El central agüimense, Juanpe Ramírez, en una imagen de archivo |
Redacción
El Girona arrancó ayer el trabajo de pretemporada después que los jugadores hayan pasado las pruebas de PCR relevantes, el primer paso antes de comenzar a entrenar en el césped con las pruebas físicas habituales.
El técnico Francisco Rodríguez, confirmado en el banquillo el día de la derrota frente al Elche, que esfumaba todas las opciones de ascenso a Primera, tiene a su disposición una plantilla que deberá variar en algunas piezas hasta que el mercado de fichas cierre, de los que 21 son del primer equipo con un contrato actual: Juan Carlos Martín, José Aurelio Suárez, Johan Mojica, Jonás Ramalho, Pedro Alcalá, Aday Benítez, el agüimense Juanpe Ramírez, Valery Fernández, Santi Bueno, Alex Granell, Borja García, Samu Sáiz, Pape Diamanka, Gerard Gumbau, Cristhian Stuani, Jairo Izquierdo, Joaquín Ceballos, Alex Gallar y Bernardo Espinosa.
Así, y a la espera de decidir el futuro de algunos miembros de la plantilla, con especial atención al central de Cruce de Arinaga, entre otros, el club comenzará con sesiones individuales y dos grupos, que se ejercitarán en sesiones de mañana y tarde, si pasan las pruebas médicas, para celebrar una primera sesión colectiva en la jornada del viernes.
El conjunto tiene confirmado dos partidos amistosos antes del comienzo de la competición oficial y se enfrentará el día 16 al F.C. Barcelona en el Estado Johan Cruyff y tres días más tarde al Zaragoza en La Romareda.
