Miércoles, 11 de noviembre.
Redacción
Las calles de Arguineguín ha sido testigo los dos últimos sábados de sendas manifestaciones vecinales para solicitar medidas inmediatas al Estado para la gestión de la crisis migratoria que afecta a Canarias, especialmente al municipio de Mogán, donde se mantiene el campamento de emergencia que acoge a las personas migrantes que llegan a las costas de Gran Canaria.
La segunda de estas concentraciones ha sido convocada por la Cofradía de Pescadores de Mogán, que reivindica el traslado de las personas migrantes del muelle hacia instalaciones acondicionadas para poder volver a utilizar el espacio que ahora ocupan las carpas de Cruz Roja para la fabricación y reparación de aparejos y demás enseres de pesca.
El grupo de gobierno del Ayuntamiento de Mogán, con su alcaldesa, Onalia Bueno, al frente, se han sumado a la manifestación para continuar presionando y lograr que el compromiso asumido por el Estado se cumpla, dado que la situación actual en el ya conocido como "campamento de la vergüenza" se ha vuelto a desbordar.
"Seguimos reivindicando para que no continúe la vulneración de los derechos humanos en ese campamento que no reúne el espacio ni las infraestructuras adecuadas y tampoco unas óptimas condiciones higiénico-sanitarias", señaló Bueno, que asegura que si no se cumple con el cierre definitivo del campamento "continuará en marcha la vía judicial", en la que afirma creer fielmente, y que se refiere a la denuncia que interpuso la pasada semana en el juzgado en la que se exponen las incidencias acaecidas en el dispositivo de emergencia instalado en el Muelle de Arguineguín.
Por su parte, el Patrón Mayor de la Cofradía de Pescadores de Arguineguín, Ricardo Ortega, ha coincidido en la necesidad de desmantelar el campamento y considera, según una nota de prensa publicada en la página web del Ayuntamiento de Mogán, "la única forma de conseguirlo es trasladar el puesto de Salvamento Marítimo al Puerto de Arinaga".