Sábado, 10 de julio.
Redacción
La Federación de Lucha Canaria de Gran Canaria, representada por su presidente y vicepresidente, Francisco Rivera y José Antonio Caballero, respectivamente, mantuvo esta semana una reunión con los clubes de la isla para planificar la próxima temporada.
En el encuentro explicaron que existe un compromiso firme por parte del Presidente del Gobierno de Canarias, Ángel Víctor Torres, para buscar una inminente reactivación de la lucha canaria, estableciendo fechas concretas para el retorno del único deporte que se mantiene inactivo desde el inicio de la pandemia.
Asimismo, se acordó comenzar la tramitación de licencias a partir del próximo mes de agosto y se solicitó a los clubes que manifestaran sus aspiraciones en cuanto a las categorías de cara a la próxima temporada, que se iniciará en septiembre con los entrenamientos con la máxima seguridad sanitaria para los deportistas.
La temporada, según el protocolo de la Federación de Lucha Canaria, arrancará con los luchadores vacunados, siempre y cuando los niveles de alerta en la isla permitan la práctica de la actividad de deportes de contacto continuado, debiendo realizarse pruebas PCR o antígenos antes de cada sesión y con la aplicación del sistema de burbujas para facilitar los rastreos.
La actividad competitiva, por su parte, comenzará, solo de ámbito insular, con una prueba PCR o antígenos previa, bajo el sistema de burbujas, con constancia de quienes participan en cada luchada, e incluso, de enfrentamientos directos reflejados en el acta arbitral para facilitar los rastreos.
Una vez superada la fase insular, daría inicio también la fase regional, previsiblemente en los primeros meses del año 2022.
En este sentido, el C.L. Unión Agüimes fue el único que confirmó su intención de salir en Primera Categoría, aunque sea luchando en otra isla, mientras que el Castillo y Castro Morales apuestan por la Segunda y el resto de equipos tratarán de componer plantillas que les permitan competir en Tercera, Promoción o solo en categorías base.