Domingo, 5 de junio.
El Ayuntamiento de Agüimes no permitirá más obras ni movimientos de tierra en la parcela de Arinaga que albergará la nueva urbanización residencial promovida por el Instituto Piadoso Eclesiástico Jesús Sacramentado si se vuelven a producir las grandes nubes de polvo en suspensión durante los días de fuerte viento.
Así lo han dejado claro los técnicos municipales en las diversas reuniones mantenidas esta semana con los representantes de la empresa Hermanos García Álamo S.L., responsable de la ejecución de las obras, tras advertirles de las condiciones adversas previstas para los próximos días, ya que desde ayer soplan rachas de viento de hasta 50 kilómetros por hora y de magnitud y dirección muy desfavorables, similares a los que generaron las grandes polvaredas del pasado mes de abril que provocaron un primer apercibimiento a la constructora.
En vista de la previsión, el Ayuntamiento de Agüimes exige a la empresa que cumpla con las medidas correctoras a las que se ha comprometido con el fin de minimizar las posibles molestias a los vecinos-as, pues de lo contrario, los trabajos deberán ser suspendidos hasta que el viento amaine y las condiciones atmosféricas permitan su reanudación.
Entra las medidas acordadas figuran aumentar las cubas de agua, los recursos humanos y la frecuencia de riego del terreno, así como el número de apisonadoras para procurar una mayor compactación del suelo, además de limitar la circulación libre de maquinaria por toda la parcela, de forma que se establezcan carriles ara evitar que la rodadura indiscriminada de los camiones aumente la superficie erosionada y facilite la formación de las nubes de polvo en suspensión que acaban introduciéndose en casas, cubriendo vehículos y afectando a instalaciones públicas como el instituto o el consultorio médico.
El Ayuntamiento de Agüimes ha transmitido a la entidad promotora que las medidas preventivas tomadas durante el episodio de fuertes vientos del pasado mes de abril resultaron del todo insuficientes, por lo que tras las reuniones mantenidas esta semana se confía en el cumplimiento de las medidas correctoras por parte de la constructora, que cuenta con reconocida experiencia en este tipo de obras y con medios más que suficientes para mitigar el posible impacto.
De no ser así, y en caso de que se vuelvan a producir las grandes nubes de polvo, se vulnerarían las ordenanzas municipales y la legislación vigente en materia de contaminación atmosférica, lo que obligaría a la administración local a emplear todos los medios a su alcance para revertir la situación.
