Jueves, 29 de diciembre.
Fernando T. Romero*
Desde 1967, a los tres años escasos de construido el edificio de la Plaza del Mercado, éste se transformará debidamente decorado, cada 5 de enero, en el “Palacio del rey Herodes”, lugar de la tercera escenificación del Auto de los Reyes Magos, y desde donde se incorporan a la Magna Cabalgata toda la variopinta comitiva de ambientación histórica de la época romana, que recorre gozosamente las calles del casco de la Villa en honor al niño-Dios, haciendo las delicias de pequeños y mayores.
Pero, además, pasando los años y fuera de las fechas navideñas, este edificio ha sido utilizado escasamente y de manera diferente, según el criterio de las sucesivas Corporaciones Municipales. Por ejemplo, con la alcaldía de Lucas Bordón Suárez (1966-1969), en diciembre de 1967, la Corporación decidía que, “hasta que se inaugurase la Plaza del Mercado, este edificio se cederá en arrendamiento para actos o festejos, previo abono de 1.000 ptas./día”.
Es así, como a petición de Francisco Vega Monroy, presidente de la Sociedad “Roque Aguayro”, en febrero de 1969, se le cede el mencionado edificio para celebrar bailes con motivo de las Fiestas de Invierno/1969. Sin embargo, a pesar de que son trece los días de bailes, “teniendo en cuenta las circunstancias que concurren en este caso, el local se arrienda por 5.000 ptas.” (para los 13 días).
En este edificio también se celebraron bodas, previo el abono de las 1.000 ptas. Tal fue el caso de las celebraciones en los días 4 de mayo, 11 de mayo y 8 de junio de 1969, a solicitud, respectivamente, de Lorenzo Díaz Bordón, Cristóbal Vega Tejera y Francisco Rodríguez Castellano. En este mismo año (1969), con motivo de las fiestas de San Juan Bautista de La Salle y de San Fernando, se cedió, igualmente, este edificio para un desfile de variedades, a petición del Delegado Local de Juventudes.
Sin embargo, siendo ya alcalde Luis Trujillo González (1969-1977), se prohibieron los arrendamientos. Por ejemplo, en enero de 1970, el presidente de la Sociedad “Roque Aguayro”, volvió a solicitar el local de la Plaza del Mercado para la celebración de las Fiestas de Invierno/1970, pero la Corporación decidió denegar la solicitud “por los inconvenientes que se vienen presentando cada vez que dicho local se destina a fines distintos para los que fue construido.”
Bajo la alcaldía de Rigoberto Artiles Romero (1977-1979) tuvo lugar un hecho curioso. En abril de 1978, la Corporación decidió trasladar el Ayuntamiento (la Casa Consistorial) al edificio del Mercado Municipal, que se encontraba sin ninguna utilización, encargándose al aparejador municipal que realizara un informe técnico para la habilitación de los locales. Pero, casualmente, sólo un mes después (mayo), los hermanos Manrique de Lara y Castillo Olivares ofertaron sus terrenos de Cercado Grande a la Corporación para la construcción de las nuevas Casas Consistoriales y del Ambulatorio. Evidentemente, el Ayuntamiento aceptó la oferta y nunca más se supo del traslado de la Casa Consistorial al Ejido.
Luego, con la llegada de la democracia, la Corporación aprobó una moción del grupo Roque Aguayro (octubre, 1979), en la que se proponía iniciar el expediente de cambio de uso del edificio para destinarlo a actividades deportivo-culturales. Destacamos del texto lo siguiente: “Teniendo en cuenta la falta de utilidad a que ha estado sometido el edificio de la Plaza del Mercado Municipal desde su construcción, …entendiendo que en la actualidad el municipio carece de centros deportivo-culturales…, previo el acondicionamiento de este inmueble, se propone que el edificio destinado a Mercado Municipal, se apruebe su cambio de uso por Salón Deportivo-Cultural y que, por parte de este Ayuntamiento, se facilite al máximo la posibilidad de practicar en el mismo las actividades deportivas que se consideren.” En años posteriores, el edificio fue también la sede en donde se impartieron diversos talleres de formación profesional.
Y, en otro orden de cosas y continuando con lo que venía siendo habitual, en nombre de la Asociación de Antiguos Alumnos “La Salle”, en diciembre de 1981, Pedro Rodríguez Romero solicitaba al Ayuntamiento “los locales del Mercado Municipal para la confección de la Cabalgata de Reyes”. Lo mismo ocurriría, de forma rutinaria, en octubre del año siguiente (1982), añadiendo entonces la Corporación que “debía ponerse de acuerdo con la Asociación de Judo que en la actualidad ocupa el edificio”. De esta manera, fue consolidándose este edificio como depositario permanente de algunos elementos y materiales de la Magna Cabalgata en estrecha colaboración con el Ayuntamiento.
Como ya hemos mencionado, desde 1967 hasta el año 2020, ambos inclusive (54 años), el destino de este peculiar edificio de la Villa de Agüimes ha estado ligado a la trayectoria y devenir histórico de la Magna Cabalgata-Auto de los Reyes Magos. Esta escenificación teatral por las calles del casco de la Villa, desde sus inicios, ha sido siempre muy bien acogida, muy querida y altamente valorada por los ciudadanos. Además, constituye todo un espectáculo multitudinario visitado por los niños y mayores del municipio, de la comarca e incluso del resto de la isla.
Después de tantos años de representación, la Magna Cabalgata-Auto de los Reyes Magos se ha convertido en tradición y patrimonio singular de la Villa de Agüimes. Conscientes de ello, la Asociación “La Salle” decidió iniciar los trámites para que el Auto de los Reyes Magos sea declarado “Bien Inmaterial de Interés Cultural”. Esta iniciativa ha contado con el apoyo institucional del Ayuntamiento de Agüimes, mediante acuerdo unánime de su Corporación Municipal, tomado en la sesión plenaria del 29 de marzo de 2021.
La Asociación ya ha remitido el dossier al Cabildo de Gran Canaria, administración encargada de tramitar este tipo de expedientes. Posteriormente, el mismo será enviado al Gobierno de Canarias, que será la institución que en última instancia firme el mencionado reconocimiento.
La ley canaria que rige este asunto define como bien inmaterial “a toda manifestación de la cultura popular y tradicional que la comunidad reconozca como parte integrante de su patrimonio”. La Asociación “La Salle” entiende que el Auto de los Reyes Magos y la Magna Cabalgata se encuentran dentro de lo estipulado para poder ser declarado “Bien Inmaterial de Interés Cultural”, figura legal que, además de aumentar el prestigio de la propia Asociación y de Agüimes, garantizaría, aún más, la protección y el futuro de esta escenificación teatral que recorre las calles de la Villa de Agüimes desde el año 1956. Esta escenificación cumplirá 68 años en la próxima edición de enero de 2023 (1956-2023, ambos inclusive).
Sin embargo, los tiempos cambian y, después de la pandemia, la Magna Cabalgata-Auto de los Reyes Magos inicia una nueva etapa en su recorrido por la Villa de Agüimes a partir del 5 de enero de 2023. El dinámico y eficiente presidente, Sebastián Sánchez Vélez, y su activa y comprometida Junta Directiva convocaron y celebraron en mayo de 2021 una Asamblea General Ordinaria de la Asociación “La Salle”, que, con muy buen criterio, decidió reubicar el domicilio del hasta ahora tradicional “Palacio del rey Herodes”, trasladándolo al Centro de Mayores de la Villa y su entorno.
Sin duda, se trata de un edificio mucho más adecuado a los tiempos que corren y con espacio exterior amplio, cómodo, despejado y, sobre todo, ofrece mayor seguridad a la gran cantidad de personas (niños y mayores) que nos visitan, por lo que se adapta mucho mejor a las actuales circunstancias sociales y exigencias legales. Con toda seguridad, este cambio al que todos nos adaptaremos muy pronto, redundará en un mayor realce y esplendor de la Magna Cabalgata.
Bienvenidos, queridos Reyes Magos, al nuevo “Palacio de Herodes” en la Villa de Agüimes.
*Fernando T. Romero es Cronista Oficial de Agüimes.