Miércoles, 24 de enero.
Redacción
El Gobierno de Canarias ha declarado la situación de prealerta por riesgo de incendios forestales en las islas de El Hierro, La Palma, La Gomera, Tenerife y Gran Canaria, una decisión que se toma en base a la información facilitada por la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), así como por otras fuentes, y en aplicación del Plan Especial de Protección Civil y Atención de Emergencias por Incendios Forestales de la Comunidad Autónoma de Canarias.
El ejecutivo regional indica que "se trata de una situación que no se recuerda que haya sido declarada anteriormente durante un mes de enero".
La previsión meteorológica apunta a una entrada de aire seco y cálido sahariano con unas temperaturas anormalmente altas para la época del año, que se verá complementada con una humedad relativa inferior al 30% en zona forestal y viento general del este y sureste moderado con áreas de fuerte y probables rachas máximas locales de entre 60 y 80 kilómetros por hora.
De hecho, la calima de evolución predominará hoy en las islas, con una reducción puntual de la visibilidad hasta los 3.000 metros, razón por la que se ha activado un aviso amarillo en Gran Canaria y Fuerteventura.
Por esta razón, la Consejería de Sanidad del Gobierno de Canarias, a través de la Dirección General de Salud Pública, ha recomendado tomar ciertas precauciones como evitar la exposición prolongada al aire exterior, mantener las ventanas cerradas y no realizar esfuerzos al aire libre.
El polvo en suspensión contribuye a resecar las vías respiratorias y, en muchas ocasiones, puede provocar un agravamiento de afecciones o síntomas relacionados con enfermedades respiratorias, tales como el asma y personas con enfermedad obstructiva crónica (EPOC), lo que hace que aumenten las visitas a los servicios de urgencias y, en algunos casos, los ingresos hospitalarios.
La exposición a este contaminante puede producir molestias torácicas, tos, palpitaciones, fatiga o incremento a la susceptibilidad a infecciones respiratorias, al menos durante los cinco días posteriores al inicio del episodio.