Sábado, 29 de junio.
Redacción
La búsqueda de Manuela Gil, la vecina de Arinaga que desapareció la noche del pasado domingo, víspera de San Juan, cuando fue a cumplir con la tradición de bañarse en el mar, prosiguió ayer por quinto día consecutivo sin resultados.
El Centro Coordinador de Emergencis y Seguridad (Cecoes) 1-1-2 comunicó ayer a través de su cuenta oficial de X (antes conocida como Twitter) que durante la mañana el helicóptero del Grupo de Emergencia y Salvamento (GES) volvió a intervenir en el dispositivo a petición de la Policía Local de Agüimes, por lo que los trabajos se desarrollaron por mar, tierra y aire.
Asimismo, el Servicio de Extinción de Incendios y Salvamento (SEIS) del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria regresó a la costa de Arinaga con el robot submarino, el primer recurso de estas características que se incorpora a un cuerpo de emergencia en Canarias, que puede ser controlado de manera remota y que cuenta con capacidad para descender hasta 150 metros de profundidad y una autonomía de ocho horas.
Por su parte, la Policía Local de Ingenio está prestando también sus servicios con un dron que sobrevuela la zona de la escollera del Puerto de Arinaga, mientras que la Guardia Civil desplazó un día más al Grupo de Especialistas en Actividades Subacuáticas (GEAS) de la Guardia Civil y el grupo de agentes que actúa desde tierra, junto al Grupo de Intervención Operativo de Rescate y Salvamento (GIORS), el Grupo Especial de Búsqueda y Evacuación (GEBE) Canarias y el Servicio de Seguridad, Salvamento y Socorrismo del Ayuntamiento de Agüimes.
Además, un buen número de personas voluntarias se suma a los rastreos por diferentes zonas del litoral de nuestro municipio, a lo que se une el ofrecimiento de buceadores del Club Pandora de Arinaga, que realizan inmersiones una vez finalice el dispositivo de emergencia.
Después de cinco días de rastreo, la jornada de ayer fue crucial, pues tal y como indican los expertos, "el cuerpo tendría que haber salido a flote".
Un portavoz del Grupo de Especialistas en Actividades Subacuáticas (GEAS), señaló ayer a los medios de comunicación que en el agua está ya todo rastreado y, salvo algún acontecimiento puntual y ocasional, cesa la búsqueda, aunque la investigación y los rastreos por parte del resto de grupos continuará.