Viernes, 3 de enero.
Redacción
El CD Tenerife ha presentado a Fabio González como nuevo refuerzo invernal del equipo, último clasificado en la Liga Hypermotion y a doce puntos de la salvación, para aportar experiencia, solidez y el máximo compromiso al centro del campo blanquiazul.
El futbolista de Ingenio, afincado junto a su pareja e hijo en el Cruce de Arinaga, que un año antes había logrado el ascenso a Segunda División B con Las Palmas Atlético, debutó con la UD Las Palmas en la temporada 2017-2018 en Primera División.
Sus dos primeros cursos con el filial le sirvieron para ser una pieza importante en la tercera categoría del fútbol español, ganándose así un puesto en el primer equipo amarillo.
Ahora, de la mano del cuadro tinerfeño, Fabio González regresa a la Liga Hypermotion como refuerzo al conjunto que dirige Álvaro Cervera, donde dará lo máximo para lograr el objetivo de la permanencia.
Tras su presentación, celebrada ayer, el jugador aseguró a los medios oficiales del CD Tenerife estar "muy ilusionado y contento de que se me haya dado la oportunidad de estar en este gran club", y apuntó que, de cara al objetivo de esta campaña, "espero que entre todos podamos conseguirlo".
Asimismo, señaló que "la gente está motivada, el cambio será radical y así lo queremos mostrar en el campo, porque la afición de este club es muy grande y es el alma que necesitamos".
Por otra parte, Fabio González se despidió de la afición de la UD Las Palmas con un comunicado que comenzaba afirmando que "este es uno de los momentos más difíciles de mi carrera profesional", y agrega que "soy un afortunado porque pude cumplir el sueño de aquel niño de Ingenio que quería defender el escudo amarillo y azul y... todas mis expectativas fueron superadas".
Además, señala que "con toda la pena de mi corazón, tras once años inolvidables, llegó el momento de separar nuestros caminos porque ser futbolista es una sensación única que quiero seguir viviendo intensamente y es por eso que toca hacerlo lejos de 'mi casa'".
El centrocampista grancanario se acuerda de todas aquellas personas que le han permitido prosperar a lo largo de todo este tiempo, "desde mis primeros entrenadores en el CD Ingenio, a los de las categorías inferiores de la UD Las Palmas, hasta llegar al primer equipo, así como a médicos, fisios, readaptadores, delegados, directiva, presidente y a todos y cada uno de los compañeros con los que he aprendido que ninguno de nosotros es tan fuerte como todos juntos".
Asimismo, tiene unas sentidas palabras a su familia, padre, madre y hermano, que desde pequeño "me acompañaron en esta andadura, no exenta de momentos delicados, y a mi pareja, Rosa, que también me ha permitido cumplir el sueño de que mi hijo Luca pudiera ver a su padre jugar en el equipo de sus amores y transmitirle esos mismos sentimientos a él".
El futbolista de Ingenio, afincado junto a su pareja e hijo en el Cruce de Arinaga, que un año antes había logrado el ascenso a Segunda División B con Las Palmas Atlético, debutó con la UD Las Palmas en la temporada 2017-2018 en Primera División.
Sus dos primeros cursos con el filial le sirvieron para ser una pieza importante en la tercera categoría del fútbol español, ganándose así un puesto en el primer equipo amarillo.
Ahora, de la mano del cuadro tinerfeño, Fabio González regresa a la Liga Hypermotion como refuerzo al conjunto que dirige Álvaro Cervera, donde dará lo máximo para lograr el objetivo de la permanencia.
Tras su presentación, celebrada ayer, el jugador aseguró a los medios oficiales del CD Tenerife estar "muy ilusionado y contento de que se me haya dado la oportunidad de estar en este gran club", y apuntó que, de cara al objetivo de esta campaña, "espero que entre todos podamos conseguirlo".
Asimismo, señaló que "la gente está motivada, el cambio será radical y así lo queremos mostrar en el campo, porque la afición de este club es muy grande y es el alma que necesitamos".
Por otra parte, Fabio González se despidió de la afición de la UD Las Palmas con un comunicado que comenzaba afirmando que "este es uno de los momentos más difíciles de mi carrera profesional", y agrega que "soy un afortunado porque pude cumplir el sueño de aquel niño de Ingenio que quería defender el escudo amarillo y azul y... todas mis expectativas fueron superadas".
Además, señala que "con toda la pena de mi corazón, tras once años inolvidables, llegó el momento de separar nuestros caminos porque ser futbolista es una sensación única que quiero seguir viviendo intensamente y es por eso que toca hacerlo lejos de 'mi casa'".
El centrocampista grancanario se acuerda de todas aquellas personas que le han permitido prosperar a lo largo de todo este tiempo, "desde mis primeros entrenadores en el CD Ingenio, a los de las categorías inferiores de la UD Las Palmas, hasta llegar al primer equipo, así como a médicos, fisios, readaptadores, delegados, directiva, presidente y a todos y cada uno de los compañeros con los que he aprendido que ninguno de nosotros es tan fuerte como todos juntos".
Asimismo, tiene unas sentidas palabras a su familia, padre, madre y hermano, que desde pequeño "me acompañaron en esta andadura, no exenta de momentos delicados, y a mi pareja, Rosa, que también me ha permitido cumplir el sueño de que mi hijo Luca pudiera ver a su padre jugar en el equipo de sus amores y transmitirle esos mismos sentimientos a él".