Jueves, 17 de julio.
Redacción
El Teatro Víctor Jara de Vecindario acogió ayer el Encuentro SER Canarias, un espacio de reflexión y debate que reunió a los principales protagonistas del modelo Ecoisla, un referente de sostenibilidad y energías renovables en Gran Canaria.
En la cita participaron el Presidente del Cabildo de Gran Canaria, Antonio Morales; el Alcalde de Santa Lucía, Francisco García; y el Alcalde de Agüimes, Óscar Hernández,, quienes compartieron su visión sobre el origen y futuro de este proyecto que ha transformado la isla.
La jornada comenzó con un reconocimiento a la colaboración entre los tres municipios que conforman la Mancomunidad del Sureste, Ingenio, Agüimes y Santa Lucía de Tirajana, una cooperación intermunicipal clave para desarrollar el concepto de Ecoisla, un proyecto que comenzó con la construcción de la primera desaladora, pero que hoy se ha expandido a una red de energías renovables basadas en la energía solar y eólica.
Antonio Morales destacó la importancia de la colaboración entre los tres municipios, afirmando que "la Ecoisla es el resultado de un esfuerzo común, de un plan que no solo busca resolver problemas, sino anticiparse a los desafíos que plantea el futuro".
Asimismo, recordó que en 1990 los tres municipios se unieron para construir una desaladora que hoy es un ejemplo de gestión de recursos hídricos, y aseguró que "la visión fue clara desde el principio, pues no se trataba solo de resolver problemas locales, sino de construir un modelo sostenible que pudiera servir a toda la isla".
En cuanto al papel de la ciudadanía, Morales destacó que la implicación de las personas ha sido esencial para que el proyecto haya tenido éxito.
"La participación de las empresas y los ciudadanos-as, dijo, ha sido fundamental porque Ecoisla no es solo un modelo de infraestructuras, sino una transformación en la mentalidad de la gente, una apuesta por el futuro, por un desarrollo que beneficia a todos".
Por su parte, el Alcalde de Santa Lucía de Tirajana, Francisco García, subrayó la importancia de la ciencia y la tecnología en el desarrollo del modelo.
"Santa Lucía, apuntó, ha sabido integrar la ciencia y la tecnología en su crecimiento. y. la creación de la concejalía de relaciones con el Instituto Tecnológico de Canarias (ITC) es una prueba de ello", y añadió que "gracias a la innovación, hemos logrado avanzar en energías renovables y en la mejora de los servicios para nuestros ciudadanos-as".
También hizo hincapié en la estabilidad política de la Mancomunidad del Sureste, que ha permitido que el proyecto avance a pesar de los cambios de gobiernos municipales y autonómicos.
"Lo que diferencia a nuestra Mancomunidad es que, a pesar de las diferencias políticas siempre hemos priorizado los intereses comunes, y el proyecto Ecoisla no habría sido posible sin ese compromiso colectivo", agregó.
El encuentro también abordó los retos y las perspectivas de la Ecoisla en el futuro, y una de las grandes apuestas de la Mancomunidad del Sureste es la creación de comunidades energéticas, donde tanto el sector privado como los ciudadanos-as jueguen un papel activo en la producción y distribución de energía renovable.
El primer edil agüimense, Óscar Hernández, explicó que el municipio ha sido pionero en la implementación de sistemas de energías renovables, con proyectos como la instalación de parques fotovoltaicos y eólicos.
"El ciclo integral del agua, la gestión de residuos y la generación de energía limpia son claves para asegurar un futuro sostenible para nuestra región, y Ecoisla, sin dudas, es un proyecto que nos beneficia a todos, no solo a los municipios que la componen, sino a toda la isla", apuntó.
El Cabildo de Gran Canaria ha sido crucial en la creación de una infraestructura que apoya la transición energética en la isla, como lo demuestra la reciente capacidad de Gran Canaria para generar 113 megavatios a través de energía fotovoltaica, cubriendo casi un cuarto de la demanda en ciertos momentos del año.
En el ámbito de la energía, el tema de la interconexión energética de las islas fue otro de los puntos clave del encuentro.
La futura conexión entre Gran Canaria y Fuerteventura, a partir de 2030, será fundamental para optimizar la producción y el consumo de energía, y en este sentido, Morales expresó su optimismo, señalando que "la interconexión no solo fortalecerá nuestra autonomía energética, sino que también nos permitirá aprovechar al máximo nuestras infraestructuras renovables".
Además, se discutió el potencial de la eólica marina en el sureste de Gran Canaria, donde se prevé que se instalen parques de energía eólica en el futuro cercano.
Sin embargo, este tipo de proyectos requiere de "una planificación estratégica que permita maximizar el rendimiento sin afectar al entorno natural ni a la calidad de vida de los residentes", comentó Francisco García.
Otro de los temas debatidos fue el equilibrio entre las energías renovables y la soberanía alimentaria, y en este sentido, algunos participantes expresaron su preocupación por el uso de terrenos que en el pasado se destinaron a la agricultura para instalar paneles solares.
Sin embargo, la mayoría coincidió en que "la clave está en encontrar soluciones que no sacrifiquen la producción de alimentos en detrimento de la energía, pues necesitamos ser ambiciosos en la transición energética, pero también respetuosos con el medio ambiente y con las necesidades de nuestra población", concluyó Óscar Hernández.
Ecoisla ha demostrado que la colaboración entre municipios, la participación ciudadana y la visión a largo plazo son esenciales para lograr una transición energética exitosa.
Gracias a la gestión compartida de los recursos, los tres municipios han logrado transformarse en un modelo de sostenibilidad para el resto de Canarias y más allá.
Los próximos años serán clave para seguir desarrollando este modelo y el desafío ahora es expandir el concepto de comunidades energéticas a más áreas y fomentar una mayor participación pública y privada en proyectos de energías renovables.
Si algo quedó claro en el Encuentro SER Canarias es que el futuro de Gran Canaria pasa por la cooperación, la sostenibilidad y la innovación.
En la cita participaron el Presidente del Cabildo de Gran Canaria, Antonio Morales; el Alcalde de Santa Lucía, Francisco García; y el Alcalde de Agüimes, Óscar Hernández,, quienes compartieron su visión sobre el origen y futuro de este proyecto que ha transformado la isla.
La jornada comenzó con un reconocimiento a la colaboración entre los tres municipios que conforman la Mancomunidad del Sureste, Ingenio, Agüimes y Santa Lucía de Tirajana, una cooperación intermunicipal clave para desarrollar el concepto de Ecoisla, un proyecto que comenzó con la construcción de la primera desaladora, pero que hoy se ha expandido a una red de energías renovables basadas en la energía solar y eólica.
Antonio Morales destacó la importancia de la colaboración entre los tres municipios, afirmando que "la Ecoisla es el resultado de un esfuerzo común, de un plan que no solo busca resolver problemas, sino anticiparse a los desafíos que plantea el futuro".
Asimismo, recordó que en 1990 los tres municipios se unieron para construir una desaladora que hoy es un ejemplo de gestión de recursos hídricos, y aseguró que "la visión fue clara desde el principio, pues no se trataba solo de resolver problemas locales, sino de construir un modelo sostenible que pudiera servir a toda la isla".
En cuanto al papel de la ciudadanía, Morales destacó que la implicación de las personas ha sido esencial para que el proyecto haya tenido éxito.
"La participación de las empresas y los ciudadanos-as, dijo, ha sido fundamental porque Ecoisla no es solo un modelo de infraestructuras, sino una transformación en la mentalidad de la gente, una apuesta por el futuro, por un desarrollo que beneficia a todos".
Por su parte, el Alcalde de Santa Lucía de Tirajana, Francisco García, subrayó la importancia de la ciencia y la tecnología en el desarrollo del modelo.
"Santa Lucía, apuntó, ha sabido integrar la ciencia y la tecnología en su crecimiento. y. la creación de la concejalía de relaciones con el Instituto Tecnológico de Canarias (ITC) es una prueba de ello", y añadió que "gracias a la innovación, hemos logrado avanzar en energías renovables y en la mejora de los servicios para nuestros ciudadanos-as".
También hizo hincapié en la estabilidad política de la Mancomunidad del Sureste, que ha permitido que el proyecto avance a pesar de los cambios de gobiernos municipales y autonómicos.
"Lo que diferencia a nuestra Mancomunidad es que, a pesar de las diferencias políticas siempre hemos priorizado los intereses comunes, y el proyecto Ecoisla no habría sido posible sin ese compromiso colectivo", agregó.
El encuentro también abordó los retos y las perspectivas de la Ecoisla en el futuro, y una de las grandes apuestas de la Mancomunidad del Sureste es la creación de comunidades energéticas, donde tanto el sector privado como los ciudadanos-as jueguen un papel activo en la producción y distribución de energía renovable.
El primer edil agüimense, Óscar Hernández, explicó que el municipio ha sido pionero en la implementación de sistemas de energías renovables, con proyectos como la instalación de parques fotovoltaicos y eólicos.
"El ciclo integral del agua, la gestión de residuos y la generación de energía limpia son claves para asegurar un futuro sostenible para nuestra región, y Ecoisla, sin dudas, es un proyecto que nos beneficia a todos, no solo a los municipios que la componen, sino a toda la isla", apuntó.
El Cabildo de Gran Canaria ha sido crucial en la creación de una infraestructura que apoya la transición energética en la isla, como lo demuestra la reciente capacidad de Gran Canaria para generar 113 megavatios a través de energía fotovoltaica, cubriendo casi un cuarto de la demanda en ciertos momentos del año.
En el ámbito de la energía, el tema de la interconexión energética de las islas fue otro de los puntos clave del encuentro.
La futura conexión entre Gran Canaria y Fuerteventura, a partir de 2030, será fundamental para optimizar la producción y el consumo de energía, y en este sentido, Morales expresó su optimismo, señalando que "la interconexión no solo fortalecerá nuestra autonomía energética, sino que también nos permitirá aprovechar al máximo nuestras infraestructuras renovables".
Además, se discutió el potencial de la eólica marina en el sureste de Gran Canaria, donde se prevé que se instalen parques de energía eólica en el futuro cercano.
Sin embargo, este tipo de proyectos requiere de "una planificación estratégica que permita maximizar el rendimiento sin afectar al entorno natural ni a la calidad de vida de los residentes", comentó Francisco García.
Otro de los temas debatidos fue el equilibrio entre las energías renovables y la soberanía alimentaria, y en este sentido, algunos participantes expresaron su preocupación por el uso de terrenos que en el pasado se destinaron a la agricultura para instalar paneles solares.
Sin embargo, la mayoría coincidió en que "la clave está en encontrar soluciones que no sacrifiquen la producción de alimentos en detrimento de la energía, pues necesitamos ser ambiciosos en la transición energética, pero también respetuosos con el medio ambiente y con las necesidades de nuestra población", concluyó Óscar Hernández.
Ecoisla ha demostrado que la colaboración entre municipios, la participación ciudadana y la visión a largo plazo son esenciales para lograr una transición energética exitosa.
Gracias a la gestión compartida de los recursos, los tres municipios han logrado transformarse en un modelo de sostenibilidad para el resto de Canarias y más allá.
Los próximos años serán clave para seguir desarrollando este modelo y el desafío ahora es expandir el concepto de comunidades energéticas a más áreas y fomentar una mayor participación pública y privada en proyectos de energías renovables.
Si algo quedó claro en el Encuentro SER Canarias es que el futuro de Gran Canaria pasa por la cooperación, la sostenibilidad y la innovación.